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El presidente de Bolivia ratifica ante amazónicos su principio de mandar obedeciendo

Firma Morales pacto que anula vía en zona indígena; sigue negociando

El ministerio de Energía anuncia desembolso de 18.4 mdd para nacionalizar la hidroeléctrica Corani

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El presidente de Bolivia, Evo Morales, durante el anuncio de este fin de semana de que se cancela un tramo carretero de 70 kilómetros que cruzaría la reserva ecológica Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro SécureFoto Reuters
 
Periódico La Jornada
Domingo 23 de octubre de 2011, p. 24

La Paz, 22 de octubre. El presidente de Bolivia, Evo Morales, firmó hoy un acuerdo con dirigentes amazónicos que anula el proyecto gubernamental para la construcción de una carretera que atraviesa la reserva ecológica conocida como Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis), en el departamento de Beni, norte de Bolivia, y que uniría ese departamento con el de Cochabamba.

La decisión de cancelar la segunda de tres etapas de una vía asfaltada que uniría al centro y norte de la nación fue anunciada el viernes por el mandatario, quien en varias ocasiones esperó infructuosamente a representantes de cientos de amazónicos, quienes caminaron 600 kilómetros durante 65 días y llegaron el miércoles pasado a La Paz para expresar al gobernante su rechazo a la carretera.

Al fundamentar los motivos de su decisión, Morales dijo que su gobierno responde al principio de mandar obedeciendo, lo que significa una ratificación continua de la soberanía popular en el Estado plurinacional boliviano.

El acuerdo firmado este sábado fue resultado de una reunión entre el gobernante y 30 representantes de un millar de indígenas que acampan desde hace tres días en la Plaza Murillo de La Paz, frente a las sedes de los poderes Ejecutivo y Legislativo.

El acuerdo prohíbe construcción de carreteras y asentamientos

El entendimiento fija los términos de una legislación especial que declara la intangibilidad de la reserva natural y, en consecuencia, prohíbe cualquier proyecto carretero que atraviese esa zona, así como nuevos asentamientos humanos.

La Asamblea Legislativa analizará a partir de este lunes la norma que sustituirá otra iniciativa legal que autorizaba una consulta regional para validar las obras en la reserva. Morales propuso el pasado 26 de septiembre llevar a cabo esta consulta en los departamentos vinculados a la carretera: Beni, en el norte, y Cochabamba, en el centro.

A pesar de la cancelación del segundo tramo de unos 70 kilómetros, continuarán los trabajos de la primera y tercera etapas de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos, con una longitud de 230 kilómetros. La obra tenía un costo global de 477 millones de dólares, financiada por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social de Brasil y el Tesoro General de la Nación de Bolivia.

El líder de los indígenas que habitan la reserva del Tipnis, Fernando Vargas, explicó que tras la firma del acuerdo continuarán las conversaciones para resolver otras 15 demandas presentadas a Morales, incluida la exigencia de sancionar a los responsables de la represión policial que sufrieron en septiembre los indígenas, cuando aún se encontraban en los límites de Beni y Cochabamba.

El diálogo entre el mandatario y los indígenas comenzó a las 5:30 horas de este sábado. Durante la jornada hubo tres sesiones, pero no se informó sobre los temas tratados, entre los cuales se encuentra la exigencia de paralizar las actividades de extracción de gas en el Parque Aguaragüe, que provee 80 por ciento de la producción nacional del hidrocarburo y es una fuente de ingresos del Estado.

El gobierno ha señalado antes que esa demanda no puede ser atendida, pero se ha mostrado interesado en promover otros proyectos de desarrollo económico.

En un recceso, al mediodía, Morales acudió a un acto público en el que denunció que Estados Unidos y otras potencias buscan utilizar reivindicaciones sociales para generar enfrentamientos y justificar una hipotética invasión. La misma política de división y apoyo a grupos rebeldes fue aplicada en Libia para aprovecharse del petróleo, que ahora disputarán Estados Unidos y los países europeos.

En tanto, el Ministerio de Hidrocarburos y Energía anunció el desembolso de 18.4 millones de dólares para consolidar la nacionalización de la hidroeléctrica Corani, en Cochabamba, antes propiedad de la francesa GDF Suez.