Acapulco, Gro., 19 de octubre. Los profesores de la región Acapulco-Coyuca de Benítez, que desde el 25 de agosto suspendieron labores de manera intermitente en al menos 80 zonas escolares en demanda de seguridad para los planteles de esa zona, dieron por concluido su movimiento luego de que el gobernador Ángel Aguirre Rivero firmó la minuta que exigían para regresar a las aulas.

En la mesa de trabajo que sostuvo con representantes de los inconformes en la zona Diamante, el mandatario estatal signó el acuerdo de nueve puntos, entre los que sobresalen la suspensión de las actas administrativas por faltar a clases y de las órdenes de aprehensión giradas contra los profesoers por encabezar bloqueos a las vías de comunicación y a la coordinación educativa de Acapulco y Coyuca.

Asimismo, se dará seguimiento a las medidas de vigilancia acordadas y se investigarán los asesinatos de maestros ocurridos en las semanas recientes, lo que permitiría regresar a la normalidad en los planteles escolares, según dijo el propio gobernador Aguirre Rivero.

La firma ocurrió mientras en Acapulco unos 5 mil profesores efectuaban la quinta manifestación por la seguridad, al tiempo que otros 2 mil marchaban en Chilpancingo, en solidaridad con sus compañeros del puerto, quienes el miércoles pasado fueron desalojados de la avenida costera Miguel Alemán.

La marcha de hoy se efectuó sobre la misma vialidad y casi arribaba a la glorieta de la Diana, rumbo al centro de la ciudad, cuando una comisión de maestros llegó hasta ese punto para informar a los marchistas del compromiso gubernamental, lo que fue recibido con euforia. Allí se informó que el regreso a clases será el próximo lunes, aunque desde este jueves limpiarán salones y patios de los planteles.

En la ciudad de Chilpancingo, miembros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (Ceteg) marcharon desde el centro de la ciudad al palacio de gobierno, donde su dirigente, Gonzalo Juárez Ocampo, demandó que sean integrantes del Ejército y la Armada quienes vigilen las escuelas, porque no hay confianza en la policía municipal ni en la estatal.

Por otra parte, el Frente de Masas de Guerrero, en voz de su dirigente, Minervino Morán, señaló que esa organización rompe el diálogo con Aguirre y reiteró sus demandas: cancelación de permisos para la explotación de mineras en la zona Montaña-Costa; supresión del proyecto de presa La Parota, y fin a la Alianza por la Calidad de la Educación.

Por su parte, el gobernador reconoció la lucha magisterial y subrayó que los maestros de Guerrero, y en especial de Acapulco, tuvieron una actitud valerosa, de vanguardia, porque fueron las primeras voces que se levantaron para decir a la nación el problema tan delicado que estábamos viviendo.