En noviembre del año pasado, la Armada de México asestó un golpe al cártel del Golfo (CdG), cuando abatió a su líder Antonio Ezequiel Cárdenas Guillén, Tony Tormenta, en Matamoros, Tamaulipas. Once meses después, las fuerzas especiales de infantería de Marina cierran cada vez más el cerco para capturar a su sucesor Eduardo Costilla Sánchez, El Coss, en esa entidad fronteriza.

Fuentes navales señalaron lo anterior y agregaron que Costilla Sánchez escapó recientemente de ser detenido en el municipio de Miguel Alemán, donde los marinos habían detectado su presencia.

Los informantes reconocieron que no es la primera vez que El Coss logra evadir a los marinos, aunque argumentaron que el líder del CdG burla la persecución cruzando a Estados Unidos.

El año pasado, la Armada de México asestó su primer gran golpe en Tamaulipas, cuando en noviembre ultimó a Tony Tormenta en un operativo en el que fueron detonadas más de 300 granadas y en el que fueron detenidos 47 integrantes de esa organización y se decomisaron dos lanzacohetes, un lanzagranadas RPG, 257 granadas de mano, más de 111 mil cartuchos de diferentes calibres, mil 518 cargadores, 558 mil pesos y 393 mil 343 dólares.

Según los informantes, después de la muerte de Antonio Ezequiel (hermano de Osiel Cárdenas Guillén, quien fue extraditado a Estados Unidos en 2007), Costilla Sánchez asumió el liderazgo en esa organización delictiva, por quien la Procuraduría General de la República (PGR) ofrece hasta 30 millones de pesos de recompensa.

Apenas el lunes pasado, la Armada dio a conocer los resultados de una serie de operativos en ese estado, en los que, además de la detención del jefe de plaza del CdG en Miguel Alemán, Ricardo Salazar Pequeño, fueron abatidos 11 presuntos delincuentes y detenidos 36 más.

Según la dependencia, en los meses recientes, el número de presuntos integrantes del CdG que han muerto o han sido detenidos en operativos de la Armada se incrementó, en tanto que las bajas de los marinos fueron mínimas, lo que refleja la falta de entrenamiento de los sicarios en el manejo de las armas, que sumado al uso de camionetas con blindajes hechizos llamadas monstruo dan cuenta de que dicho grupo delictivo está desesperado, porque tienen menos recursos financieros y humanos.