Torreón, 10 de octubre. Sin sus porteros titulares, pero con sus estrellas –que coincidentemente son delanteros: Javier Hernández y Neymar–, las selecciones de México y Brasil jugarán este martes en el estadio Corona, en medio de gran expectación y severas medidas de seguridad.

La mañana del domingo se anunció la baja del arquero brasileño Julio César, y casi a la medianoche que Guillermo Ochoa no jugará el encuentro, en ambos casos por lesión. En lugar de Ochoa fue convocado Alfredo Talavera, del Toluca, quien este lunes se reportó con el Tricolor.

Pero el espectáculo está garantizado, porque los miles de aficionados que estarán en la tribuna y los que lo verán por televisión podrán disfrutar del ariete mexicano Chicharito Hernández y de la constelación de estrellas brasileñas, entre las que se encuentran Neymar y Ronaldinho.

“He visto algunos de sus goles y es un crack”, señaló Neymar, al ser consultado sobre la capacidad de Chicharito.

Por cierto, este brasileño vivirá su segunda experiencia en el nuevo estadio Corona, porque estuvo con su equipo, el Santos, en la inauguración del inmueble en 2009, cuando los de Torreón ganaron 2-1.

Jugué en este estadio en su inauguración, fue el 11 de noviembre de 2009; eso sí, no recuerdo cómo fue el partido, creo que perdimos, comentó.

La historia favorece a Brasil en sus duelos con México. Los sudamericanos tienen 20 victorias por nueve de los mexicanos; los restantes seis encuentros han sido empates.

En este partido amistoso se expondrá la condición invicta del Tricolor, que mantiene desde que el técnico José Manuel de la Torre se hizo cargo del equipo. Aunque el estratega dejó en claro que no me llena ser invicto por un largo periodo (14 juegos), nos interesa prepararnos para lo que viene. Lo importante es la eliminatoria rumbo a Brasil 2014.

Este encuentro servirá también para que el portero Oswaldo Sánchez se despida del Tri; será justo su partido número 100 con la camiseta nacional, y fue convocado expresamente para eso: recibir un homenaje por la trayectoria que tuvo como seleccionado.

Para Giovani dos Santos también será un duelo especial, porque tengo familia en ese país, mi papá es brasileño y obviamente siempre es especial para mí jugar contra Brasil.

En tanto, Rafael Márquez dijo que es una gran nación, futbolísticamente es de los más fuertes y este tipo de partidos siempre los disfrutamos mucho.

Sobre elegir a Torreón, Dos Santos consideró que fue una buena idea, sobre todo para que la gente, azotada por la inseguridad que priva en la zona, tenga diversión. Es importante venir a darle ilusión a esta ciudad; la afición mexicana siempre es espectacular, y aquí se demuestra la unión de todos los mexicanos. Creo que tenemos un gran país y esperamos dar alegría a la gente.

En el preámbulo del encuentro, el alcalde de Torreón, Eduardo Olmos, informó que se han concretado reuniones de trabajo para cubrir aspectos de seguridad pública y de coordinación con las policías y con el Ejército Mexicano. En suma, ese día en el operativo habrá más de mil efectivos.