Sábado 1º de octubre de 2011, p. 26
Amplios sectores de la población están postergando decisiones de carácter económico que tendrán un impacto en su familia y a la larga en el desarrollo del país, aseguró este viernes Jaime Ruiz Sacristán, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM).
La mitad de la población adulta del país espera que sus hijos se hagan cargo de su manutención y cuidado cuando deje de trabajar, a la vez que siete de cada 10 mexicanos no han tomado ninguna medida para solventar su retiro, dijo el presidente de los banqueros en la inauguración de la cuarta Semana de Educación Financiera.
Un sistema financiero incluyente es indispensable para el buen funcionamiento de la economía, permite a la población materializar proyectos productivos y administrar adecuadamente sus recursos
, aseguró Ruiz Sacristán.
En el mismo foro, José Antonio Meade Kuribreña, secretario de Hacienda, aseguró que la expansión de los servicios financieros debe ir acompañada de políticas para educar a la población sobre la forma de usar el crédito, los seguros y el ahorro.
En México y el mundo, las personas se enfrentan ahora a un entorno financiero cambiante, dinámico e innovador, lo que pone de manifiesto la importancia de contar con una población responsable en el uso y manejo de los recursos y de los servicios financieros a su alcance, expuso.
La cuarta edición de la Semana de Educación Financiera se realizará a partir del próximo lunes. Las actividades pueden consultarse en www.condusef.gob.mx.
Un reto, llevar servicio a clases populares: Bancomer
De los 80 millones de personas en edad de hacer uso de servicios financieros en el país, sólo 43 millones tienen algún tipo de relación con las instituciones formales del sector, expuso Jorge Monge, director de banca de corresponsales de BBVA Bancomer, el principal intermediario financiero del país.
El mayor desafío del sector es llevar los servicios a las clases populares, aquellas con ingresos de entre 5 mil y 10 mil pesos al mes, añadió. Explicó que de los 37 millones de personas que no tienen relación con el sector financiero formal, 80 por ciento, se encuentran en este nivel de ingreso y es hacia ese núcleo de población que se deben llevar servicios de crédito, ahorro o seguros, añadió.
Una forma inicial de llevar servicios han sido los cajeros automáticos, después el pago de nómina a través de cuentas bancarias y últimamente la asociación entre bancos y establecimientos comerciales en los que se realizan operaciones bancarias básicas.