En comisiones, el Senado aprobó anoche en lo general la nueva Ley de Amparo, reglamentaria de los artículos 103 y 107 de la Constitución, ordenamiento enfocado a consolidar esa figura como instrumento accesible al mayor número de personas.

La nueva Ley de Amparo amplía su ámbito de actuación, al incluir los derechos humanos reconocidos en la Constitución y en los tratados internacionales en la materia signados por el Estado mexicano, y fortalece los mecanismos y el funcionamiento del Poder Judicial de la Federación.

La legislación amplía los efectos de protección de las sentencias de amparo.

Además constituye al juicio de amparo en un medio más eficiente de control de las actuaciones de las autoridades.

Las comisiones de Gobernación y de Estudios Legislativos Segunda, que presiden Jesús Murillo Karam (priísta) y Tomás Torres (perredista), encabezaron la reunión, en la que se aprobó en lo general el ordenamiento, pero se reservaron 15 artículos, que serán discutidos y votados la próxima semana.

Los legisladores dictaminan con la presión del tiempo, ya que en la reforma constitucional se dio un plazo de 120 días para tener lista la ley secundaria, y éste vence el próximo 6 de octubre.

Por lo anterior, la intención es ponerse de acuerdo en torno a los artículos reservados, con el fin de llevar el dictamen al pleno los próximos días y turnarlo de inmediato a la Cámara de Diputados.