En la víspera del aniversario 26 del terremoto que azotó la ciudad de México, la Coordinación General de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación (SG) prepara un simulacro masivo y otras acciones preventivas ante este tipo de fenómenos.

En tanto, avanza la revisión administrativa para crear una nueva instancia cuyo objetivo será definir la estrategia gubernamental, políticas y estrategias integrales en los tres órdenes de gobierno, ante la ocurrencia de sismos y tsunamis de gran magnitud.

Esta área buscará también ordenar la aplicación de recursos para evitar daños mayores en caso de presentarse estos fenómenos; es decir, fortalecer las acciones preventivas, especialmente lo relacionado con construcciones en áreas de riesgo.

Gobernación ha alertado en episodios anteriores que si bien no existen los elementos científicos para prever cuándo habrá un terremoto, las probabilidades y los estudios acerca de este tema indican que existe la suficiente energía acumulada para que esto ocurra, aunque podría liberarse la potencia lo mismo en decenas o cientos de pequeños sismos que en uno de consecuencias graves para los asentamientos humanos.

No será una carga presupuestal

Una enmienda al reglamento interior de la SG, actualmente en la última fase de revisión, previa a su publicación en el Diario Oficial de la Federación y la consecuente entrada en vigor, señala que es necesario generar un área de coordinación que se sume a las tareas de protección civil y del Fondo Nacional de Desastres; este último, para aportar recursos para atención de la población afectada y de reconstrucción en caso de desastres.

La dirección general en ciernes tendrá también la responsabilidad de establecer una coordinación con instituciones y organismos de los sectores privado y social, esto es, “las políticas y estrategias frente a sismos y tsunamis de gran magnitud en territorio nacional, de conformidad con los lineamientos que, en su caso, expida la Coordinación General de Protección Civil”.

Esta área, sin precedente en México, deberá promover los mecanismos necesarios para el desarrollo e interconexión de sistemas informáticos entre los participantes de los planes y programas en lo que correspondan a la materia de protección civil a causa de sismos y tsunamis de gran magnitud, que impacten en territorio nacional.

Según el plan, actualmente en revisión en la Comisión de Mejora Regulatoria, la SG determinará en los 90 días siguientes a su entrada en vigor qué se entenderá por sismo o tsunami de gran magnitud. Esta nueva dirección general no deberá ser una carga presupuestal porque Gobernación buscará la forma de transferirle recursos, de su propia bolsa autorizada para el año entrante.