Con la finalidad de evitar el agravamiento de problemas de orden social, el gobierno de Guerrero solicitó a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) revoque el título de concesión otorgado al Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), mediante el cual le cedió la operación del puerto de Zihuatanejo y áreas de Barra de Potosí.

La demanda de cancelación de esa concesión llegó a la Cámara de Diputados, donde el legislador del PRD, Armando Ríos Piter, en una propuesta de punto de acuerdo del 31 de agosto, que será presentada esta semana en el pleno, pidió a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) la revocación del título, donde no se hace ninguna mención sobre la inclusión de los lugareños en el proceso de modernización y desarrollo del puerto.

Destaca que no hay menciones del tema social. No es posible desplazar a la gente de sus actividades económicas sin ofrecer alternativas; además, en el decreto de concesión no son suficientes las salvaguardas ambientales, se deja sólo la mención de que se apliquen las leyes vigentes.

El proyecto incluiría la construcción de un muelle de cruceros en Barra de Potosí, lo cual desplazaría a los lugareños que ofrecen servicios turísticos. En Zihuatanejo también serían relegadas las cooperativas pesqueras que laboran en la bahía, ya que el título no hace ninguna mención sobre la inclusión de este sector en su proyecto.

El gobernador Ángel Aguirre Rivero envió el 29 de agosto de 2011 un oficio al titular de la SCT, Dionisio Pérez Jácome. En el texto hace referencia al título de concesión otorgado a Fonatur Operadora Portuaria el 26 de octubre de 2010 para la Administración Portuaria Integral del Puerto de Zihuatanejo, que incluye la zona de fondeo de la bahía, así como de la Barra de Potosí.

Indica que las quejas e inconformidades expresadas por grupos ambientalistas, pescadores, transportistas y prestadores de servicios turísticas se deben a que se sienten agraviados y desplazados de sus actividades; además, la bahía ha sufrido alteraciones de orden ecológico, así como la contaminación de las aguas de la misma, producida por las obras a realizar por la concesionaria. Y concluye: El gobierno que presido comparte y hace suyas esas inquietudes.

A finales de agosto, pescadores, ambientalistas y prestadores de servicios turísticos realizaron un plantón frente a las instalaciones de Fonatur en Zihuatanejo. Adriana Luna Parra, residente de Barra de Potosí, reconoció la respuesta del gobernador ante este conflicto, pero dijo que se debe dar seguimiento a esa voluntad política.

El cabildo de Petatlán, donde se ubica Barra de Potosí, por mayoría de votos rechazó en su sesión del 31 de agosto la concesión, ya que no se tomó en cuenta la voluntad de los habitantes, quienes de manera directa serán los afectados principales si algún proyecto portuario se llevara a cabo, lo cual implicará el desalojo de las sociedades cooperativas pesqueras y de los prestadores de servicios turístico, y por lo tanto la afectación de su economía familiar.

El próximo viernes los afectados entregarán una carta al presidente Felipe Calderon, a la SCT y Fonatur, en la cual señalan que esa concesión es la punta de lanza de un megaproyecto.

En relación con el tema ambiental, la carta destaca que el valor ecológico de Barra de Potosí está documentado por investigaciones recientes realizadas por biólogos y estudiantes de la Universidad Autónoma Metropolitana, plantel Xochimilco, quienes detectaron 212 especies de aves silvestres, de las cuales 23 son endémicas y 19 están incluidas en la norma 059, que enlista especies bajo algún riesgo.

Indica que también están clasificadas 180 especies de mariposas, y que los morros que están frente a las playas de este sitio son una zona de anidación y descanso de aproximadamente 10 mil aves.

En el mar es frecuente observar ballenas jorobadas con sus críos, delfines y gran diversidad de peces. Las playas son sitios de anidación y conservación de la tortuga laúd, clasificada en peligro de extinción. El manglar, con 454 hectáreas, es fuente de vida marina y medio de subsistencia de los pescadores que habitan el pueblo. Por tal diversidad de hábitat, la Comisión Nacional para el conocimiento y Uso de la Biodiversidad catalogó el sitio como región prioritaria para la conservación de la biodiversidad.