El sector público mexicano destinará 87 centavos de cada peso que obtendrá por deuda en 2012 exclusivamente al pago de las amortizaciones generadas por su nivel de endeudamiento, y dispondrá sólo de 13 centavos para resarcir la insuficiencia de sus ingresos frente a los gastos del próximo año, se desprende del proyecto de débito enviado por el Ejecutivo federal al Congreso de la Unión.

No obstante, la petición de techo de endeudamiento interno excede en más de 61 mil millones de pesos al déficit fiscal que pretende cubrir en 2012.

Según el calendario de amortizaciones de la deuda pública, el próximo año tendrán que pagarse 418 mil 460 millones de pesos por vencimientos; pero simultáneamente se solicita autorización para contratar nuevo endeudamiento, interno y externo, hasta por 480 mil 400 millones de pesos, cantidad que representará 8.7 por ciento del saldo que habrá de alcanzar la deuda total del sector público al término del sexenio.

Hacia fines del próximo año el monto del endeudamiento total del sector público mexicano ascenderá a más de 5 billones 520 mil millones de pesos, saldo 64 por ciento superior al existente al comienzo de la actual administración gubernamental, cuando se ubicaba en 3 billones 358 mil 223 millones de pesos, de acuerdo con las cifras oficiales.

Finalmente atada a la obtención de recursos a través de la deuda, durante esta administración se habrán conseguido 360 mil 300 millones de pesos en promedio anual, por medio de los diversos mecanismos ideados para este fin, entre colocaciones de títulos emitidos o avalados por el gobierno federal en moneda local y otras divisas, la contratación de créditos con organismo financieros internacionales, así como por préstamos bancarios.

El endeudamiento público contratado a lo largo de este sexenio se habrá incrementado en 2 billones 161 mil 800 millones de pesos, equivalentes a 185 mil millones de dólares, en caso de que el Congreso de la Unión autorice al Ejecutivo federal a aumentar en 395 mil millones de pesos el nivel de la deuda pública interna y elevar en 7 mil millones de dólares (85 mil 400 millones de pesos) el saldo de la deuda externa.

Todo, durante el próximo año y bajo la premisa de que la estrategia de endeudamiento para 2012 considera financiar la mayor parte del déficit del gobierno federal en el mercado interno. El déficit del gobierno federal se calcula en una cantidad equivalente a 0.2 por ciento del producto interno bruto sin inversión de Petróleos Mexicanos, o de 2.2 por ciento del PIB si se considera esta última.

En el primer caso, el déficit fiscal por financiar sería de 30 mil 330 millones de pesos, o de unos 333 mil 628 millones si se incorpora a la medición la inversión de la paraestatal petrolera. En ambos casos, la solicitud de elevar la deuda interna en 395 mil millones de pesos durante el último año de este gobierno excede al déficit de las finanzas gubernamentales calculado para 2012.

Tal vez por eso la propuesta enviada al Congreso aclara por adelantado: cabe mencionar que el monto de endeudamiento interno requerido para el gobierno federal es mayor a su déficit presupuestario, debido a que, por las características propias de ciertos valores gubernamentales, el flujo de efectivo que se obtiene de su colocación resulta generalmente menor a su valor nominal. Sin embargo, la diferencia es de 61 mil 372 millones de pesos.

Respecto al techo de endeudamiento externo por 7 mil millones de dólares para el que se solicita autorización, el Ejecutivo asegura que esas divisas se destinarán a complementar el financiamiento de la banca de desarrollo y los programas de inversión de Pemex y la Comisión Federal de Electricidad.

Además, propone mantener la atribución, extendida a las empresas y organismos paraestatales de control directo, de incurrir en un mayor endeudamiento externo en un importe equivalente a la menor contratación de deuda interna respecto del monto autorizado, y viceversa.