En diciembre, la ciudad de México contará con ocho kilómetros de nuevas vialidades que desahogarán cien mil vehículos diarios, al ponerse en operación dos tramos de la autopista urbana de peaje en el norte y sur; el distribuidor vial Luis Cabrera, y el Puente Punta Santa Fe –cuya construcción se inició ayer–, los cuales serán de uso gratuito, informó el secretario de Obras y Servicios, Fernando Aboitiz.

Al supervisar el programa de rencarpetado y bacheo en la delegación Benito Juárez, adelantó que en noviembre comenzará la construcción del Arco Oriente, la última parte de conexión de la autopista, que estará lista hacia finales de 2013, aunque vamos a pelear por el trimer tramo, que es hasta Tláhuac. Esta semana se duplicará la capacidad de montajes para ir más rápido con la obra con total seguridad.

Después del último incidente ocurrido en los segundos pisos se estableció un protocolo de seguridad, que requiere la firma de siete personas, entre estructuristas, el director de construcción de la empresa y otro representante de ésta, así como un funcionario de gobierno, para realizar los montajes. En caso de no estar todos o existir alguna duda no se llevarán a cabo; habrá un total de 90 montajes de estructuras grandes y de más de 200 de tabletas, explicó.

Hasta la fecha, precisó, se tiene avance de 20 por ciento en la autopista urbana de peaje –tramos norte y sur del segundo piso, y supervía–, por lo que “concluiremos en tiempo, pues la derogación de Tarango como área de valor ambiental no nos genera problemas. Las sentencias concernientes a la supervía están firmes y no corremos ningún riesgo en términos de derecho de vía, por lo que traemos más de 2 mil trabajadores y más de 250 equipos trabajando”.

Así que en diciembre se abrirá a la circulación vehicular el primer tramo de Periférico norte, de Cuatro Caminos a Palmas, con seis carriles y extensión de 4.5 kilómetros, con salidas en Ejército Nacional y el deportivo Israelita, y subidas en Ejército Nacional y Toreo, donde se instalarán los sistemas de cobro, el mismo del Viaducto Bicentenario, para evitar que la gente traiga un tendedero electrónico en su parabrisas, con un costo aproximado de 6 pesos.

Otro tramo a operar será el de San Jerónimo a Picacho, que también será de cuota, así como el distribuidor vial de Luis Cabrera, cuyo primer cuerpo estará listo en los siguientes días; y el Puente Punta Santa Fe, sobre la avenida Carlos Lazo, que será un paso a desnivel con cuatro carriles –dos por sentido– para conectarse con la autopista México-Toluca, con longitud de 544.30 metros. Su costo será de 200 millones de pesos y será cubierto por las empresas, explicó.

Dijo que, a solicitud de la Secretaría de la Defensa Nacional, se construirá un deprimido que conectará Industria Militar con Ejército Nacional, a realizarse a costos compensados, al cancelarse la construcción de dos rampas de conexión en Homero y Alencastre, por lo cual no hay un incremento en el costo de la obra, y pidió también un estacionamiento, que está en análisis.