La acupuntura urbana, en la que se buscan o crean huecos en colonias centrales o barrios históricos con una sólida infraestructura, puede ser parte de una solución para ofrecer una casa digna y de calidad en una ciudad como la de México, donde ya no hay espacios donde construir y existe un rezago histórico de dos millones de viviendas y un requerimiento anual de 35 mil unidades, expresa el arquitecto Alberto Rimoch.

En entrevista con este diario señala que en la capital del país existen un sinnúmero de inmuebles abandonados u obsoletos que ya no cumplen con los estándares de seguridad que pueden ser remodelados o demolidos para ser utilizados con este fin.

Detalla que la calidad no tiene que ver con el espacio, sino que cumplan con las necesidades de cada quien. En Europa o Estados Unidos la gente vive muy dignamente en los centros de las ciudades en departamentos de 40 metros y es lo usual, pero en México estamos acostumbrados a que todo sea amplio y grande. Eso ya no puede ser así.

La redensificación de colonias, admite, no es la solución absoluta, pero sí una alternativa, pues no sólo hay escasez de superficies donde construir, sino que resulta carísimo otorgar servicios en la periferia, y no tan caro, aprovechar las áreas, donde ya existe la infraestructura.

Esta labor de acupuntura urbana no es fácil, porque se debe enfrentar la oposición vecinal, pues después de mí, ya no quiero que llegue nadie, pero tenemos que llegar a un término medio. El conflicto siempre va a existir, tenemos que ver las cosas objetivamente, cómo damos servicios y cómo cumplimos con las necesidades de las mayorías y no de un vecino en particular, apunta.

Molesta que se vayan a redensificar, sí, porque si sólo había cinco pisos y el día de mañana pueden ser 10, no me gusta, pues los servicios son escasos, ya están comprometidos, de por sí en una ciudad con tantos millones de habitantes, sin lugar a dudas, señaló.

Sin embargo, el constructor y promotor de desarrollos inmobiliarios en la Roma y Condesa, donde se vive una abierta movilización vecinal, advierte que siempre se debe cumplir con las normatividades.