Los gobernadores panistas de Puebla, Morelos, Jalisco, Sonora Baja California y Baja California Sur, y priístas del estado de México, Chihuahua, Veracruz y Yucatán, condenaron el ataque efectuado por un grupo de hombres armados el pasado jueves en el casino Royale de Monterrey, Nuevo León, en el que murieron 52 personas calcinadas, y se sumaron a la declaratoria de luto nacional decretada por el presidente Felipe Calderón y a las acciones para dar con los responsables.

Durante la ceremonia que se realizó en las pirámides de Teotihuacán, estado de México, para encender el fuego nuevo con motivo de los XVI Juegos Panamericanos Guadalajara 2011, los mandatarios del estado de México y Jalisco, Enrique Peña Nieto y Emilio González Márquez, respectivamente, guardaron un minuto de silencio en memoria de las víctimas.

En presencia de miembros del Comité Olímpico Internacional, González Márquez aseguró que la seguridad en los Juegos Panamericanos de Guadalajara está garantizada y pese a los hechos del jueves pasado en Monterrey no se modificará la estrategia de seguridad.

Tenemos que replantear lo que estamos haciendo con base en la sociedad y el gobierno. Esos señores lo único que les interesa es el dinero y están dispuestos a matar, dijo. En su oportunidad, Peña Nieto repudió enérgicamente el atentado y dijo: queremos expresar nuestra solidaridad a los paisanos de Nuevo León.

En Chihuahua, el gobernador de la entidad, César Duarte, informó que su administración explora recursos legales para demandar a comercializadores de fusiles de asalto producidos en Rusia y China que entran a México por Estados Unidos, debido a que 90 por ciento de los crímenes ligados con la delincuencia organizada se llevan a cabo con este armamento.

El gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle Rosas, indicó que el atentado en Monterrey demuestra que es necesario redoblar los esfuerzos para garantizar la seguridad en el país, porque mientras no se resuelva de fondo la problemática del narcotráfico, todos los estados de la República estarán expuestos a la violencia.

En tanto, el mandatario de Baja California, José Osuna Millán dijo que la pérdida de tantas vidas humanas inocentes por acciones de personas sin escrúpulos enluta nuestros corazones, pero nos invita a redoblar nuestros esfuerzos por unirnos y salir adelante. El de Veracruz, Javier Duarte, externó su solidaridad al gobernador Rodrigo Medina. Nuestras condolencias y apoyo en este momento tan difícil que están atravesando.

En Yucatán, Ivonne Ortega expresó: Repudiable; para lo que pasó no hay palabras: son civiles que estaban en una convivencia familiar, buscando una manera de divertirse y hay que hallar a los culpables y hacer castigos ejemplares.

El gobernador de Morelos, Marco Antonio Adame Castillo, izó la bandera a media asta en la explanada del zócalo de Cuernavaca, en repudio al atentado terrorista y como símbolo de condolencia con el pueblo de Nuevo León.

Cierran y supervisan casinos

Como resultado de un operativo emprendido en cinco casas de apuestas, el ayuntamiento de Guadalajara, Jalisco, clausuró ayer los casinos Gdl, Capri y Gran Nevada, por incumplir señalamientos de Protección Civil y por cuestiones de inspección, vigilancia y ecología, informó el secretario general, Roberto López Lara.

Indicó que ayer el casino Sao Paulo fue cerrado a las 16 horas porque recibió una amenaza de bomba. El negocio es propiedad de la misma operadora que maneja el Royale de Monterrey.

Los gobiernos de Puebla, Chihuahua, Baja California, Querétaro y Yucatán anunciaron operativos para garantizar que los casinos operen en óptimas condiciones y efectuaron revisiones para conocer si cumplen con la ley o si tienen vínculos con la delincuencia organizada.

Organizaciones civiles de Nuevo León señalaron que mientras el gobierno federal insista en combatir la violencia con más violencia, ocurrirán más hechos similares, por lo que propusieron cortar las fuentes de financiamiento de los grupos delictivos y castigar el lavado de dinero del narcotráfico.