Miércoles 24 de agosto de 2011, p. 23
Después de décadas de perder población debido al éxodo de mexicanos hacía Estados Unidos, nuestro país experimenta un balance cercano a cero
entre los que intentan cruzar la frontera y quienes retornan a México, aseguró el subsecretario de Población, Migración y Asuntos Religiosos de la Secretaría de Gobernación (SG), René Martín Zenteno, quien sostuvo en conferencia de prensa que datos recientes, provenientes de diversas fuentes de información, indican una notable disminución de la migración mexicana hacia aquel país.
Esta reducción, dijo, ha sido de tal magnitud que el saldo neto migratorio entre ambas naciones parece haberse empatado en los años recientes. Mencionó que las tendencias últimas de emigrantes mexicanos e inmigración a México, se reflejan en el estancamiento de la población nacional en Estados Unidos, la cual dejó de crecer a partir de 2007 y se estabilizó en cerca de 11.7 millones de personas.
Según estimaciones preliminares del Consejo Nacional de Población y del Pew Hispanic Center, basadas en los diferenciales de montos de población mexicana en Estados Unidos, la migración neta de mexicanos se redujo a casi cero. Otras combinaciones de datos mexicanos y estadunidenses también indican que existe un balance aproximado entre emigración de mexicanos y aquellos que retornan a su lugar de origen, por lo que nuestro país ya no experimenta una pérdida de población debida a la migración internacional
.
La razón principal de este fenómeno, dijo el funcionario, es la contracción de la economía estadunidense y dadas las bajas expectativas de recuperación económica en ese país, difícilmente puede esperarse un repunte de la demanda de mano de obra inmigrante mexicana en el corto plazo, sostuvo. A este factor se suma el ambiente hostil hacia los inmigrantes irregulares que se ve reflejado en más de un millón de deportaciones durante la administración del presidente Barack Obama, y en la proliferación de entornos locales negativos en términos de discurso político, opinión pública y reformas legales.
En lo que respecta a México, la propia dinámica de la población continuará reduciendo las presiones demográficas que fomentaban la emigración en el pasado. Y en la medida en que se consolide el avance socioeconómico de nuestro país en lo que respecta a acceso a bienes públicos, a oportunidades educativas y a servicios de salud, la propensión a emigrar de la población mexicana continuará disminuyendo
, aseveró.