Trípoli, 9 de agosto. Al menos 85 civiles, entre ellos más de tres decenas de niños, fallecieron durante un ataque de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en la disputada ciudad de Zliten, al este del país norafricano, denunció este martes el gobierno del líder libio Muammar Kadafi. La alianza atlántica, por su parte, afirmó que no tiene pruebas de víctimas civiles.

Según el gobierno libio, 33 niños, 32 mujeres y 20 hombres, pertenecientes a 12 familias perecieron el lunes en Majer, un pueblo de la ciudad de Zliten.

El poblado fue atacado para que los rebeldes armados pudieran entrar a él. Tres bombas cayeron. Los habitantes corrieron hacia las casas bombardeadas para salvar a sus familiares y fueron alcanzados por otras tres bombas, indicó el gobierno de Libia.

La prensa extranjera vio cuatro casas destruidas o casi totalmente destruidas por los bombardeos de la organización militar de Occidente, indicaron responsables locales al afirmar que había cuerpos bajo los escombros.

En la morgue del hospital central de la ciudad se encontraban unos 30 cuerpos, entre ellos dos niños y una mujer que fueron mostrados a los periodistas, así como otros cuerpos destrozados.

Provenientes del enclave de Misurata, la oposición armada trata desde hace más de una semana de apoderarse de Zliten, ciudad de 200 mil habitantes cuyo control es fuertemente disputado entre los alzados en armas y las fuerzas leales a Kadafi.

La OTAN afirmó este martes que carece de pruebas sobre la supuesta muerte de 85 civiles durante el bombardeo aliado.

En estos momentos, no tenemos pruebas de víctimas civiles, declaró el vocero de la operación Protector Unificado, el coronel canadiense Roland Lavoie, en una rueda de prensa retransmitida en Bruselas desde el cuartel general de Nápoles, en el sur de Italia.

El blanco del ataque en Majer fue legítimo porque era de naturaleza militar, al tratarse de dos ex instalaciones agrícolas utilizadas con fines bélicos por las tropas de Kadafi, explicó Lavoie.

Por otro lado, Canadá ordenó a los representantes diplomáticos de Libia abandonar el país en los próximos cinco días y bloqueó su acceso a las cuentas bancarias de la embajada, informó el ministro de Exteriores, John Baird.