Martes 9 de agosto de 2011, p. 25
Londres, 8 de agosto. El ministerio de Defensa de Gran Bretaña informó este lunes que investiga versiones de prensa acerca de que un soldado escocés amputaba los dedos a talibanes muertos en combate en Afganistán y los guardaba como recuerdo
. Según el tabloide The Sun, el militar, perteneciente al quinto batallón del regimiento real de Escocia, se habría dedicado a ello cuando servía en la sureña provincia de Helmand, uno de los feudos de los insurgentes.
Al parecer le cortaba un dedo a cada talibán muerto en combate. Los rumores dicen que quería guardarlos de recuerdo, lo que es algo muy macabro
, escribe el rotativo, que cita una fuente no identificada.
De acuerdo con el diario, el soldado, que efectuaba su primera misión en Afganistán, regresó a Gran Bretaña en abril pasado, tras lo cual se inició la investigación.
Clive Fairweather, comandante del Servicio Aéreo Especial (SAS), aseguró que los soldados británicos tienen la orden de tratar a los enemigos muertos con el mismo respeto que a sus compatriotas. En todo mi tiempo en el ejército, tanto con soldados escoceses como con el SAS, nunca escuché algo semejante
, dijo.
Llevarse trofeos de los combatientes muertos es un camino seguro para provocar enojo en la población local
, agregó.
Estamos fuertes, pese al ataque del sábado: Pentágono
El Pentágono intentó despejar el temor de un aparente fortalecimiento en la campaña de los talibanes, luego que el sábado combatientes afganos derribaron un helicóptero y mataron a 30 soldados estadunidenses, en su mayoría del equipo de elite de los Seals de la Marina, que dirigió la misión encubierta para matar a Osama Bin Laden en mayo anterior.
Este incidente individual no representa ningún momento clave o tendencia... aún estamos en una posición fuerte frente a los talibanes
, aseguró Dave Lapan, vocero del Pentágono, si bien admitió que los insurgentes van a seguir causando víctimas
.
El presidente Barack Obama prometió este lunes que Estados Unidos triunfará en Afganistán, a pesar de la pérdida de 30 soldados.
A su vez, el secretario de Defensa, Leon Panetta, sostuvo que las muertes son un recordatorio al pueblo estadunidense de que seguimos siendo una nación en guerra
, y prometió seguir adelante con la campaña contra los militantes que representan una amenaza para el país.