Buenos Aires, 4 de agosto. Los medios hegemónicos siguen a la caza del juez Raúl Zaffaroni instalando la supuesta posibilidad de su renuncia a la Corte Suprema, denuncia hoy el diario Tiempo Argentino al referirse a una denuncia de que uno de los departamentos que alquila el magistrado mediante un apoderado y una inmobiliaria, podrían estar siendo usados como prostíbulos.

La instalación mediática de un hecho donde ni siquiera existe la investigación previa, constatación alguna de los hechos y demás, conforma el esquema de la campaña más sucia a nivel electoral que se ha visto en Argentina desde el retorno de la democracia en 1983.

La posibilidad de la renuncia de Zaffaroni fue negada por el magistrado considerado un símbolo de la nueva corte democrática e independiente, que se instaló después de una larga lucha en que miles de manifestantes reclamaron con sucesivos abrazos a la sede de Tribunales en los años 2001-2002 para exigir un inmediato cambio de lo que se consideraba hasta entonces como una Corte sumisa a la política de esos tiempos.

“El escándalo político instalado en primer término por el sitio web perfil.com y el periódico Libre, reforzado por el cartel mediático de Clarín y La Nación, se inscribe en el marco de la necesidad del ‘disciplinamiento’ y amedrentramiento de los magistrados a medida que se acerca no sólo la elección presidencial de octubre y la aplicación plena de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual de la democracia sino, fundamentalmente por las definiciones acerca del caso Papel Prensa, causa central para los intereses del monopolio comandado por Héctor Magnetto en el Grupo Clarín y también para el diario de los Mitre ( La Nación)”, denuncia Tiempo Argentino.

Algo de todo este armado hizo recordar a algunos analistas aquí el caso Murdoch en Londres, minetras siguen voces de solidaridad en Argentina y en el mundo con el juez Zaffaroni.

Denuncias sobre el caso papel prensa

Las sorpresivas revelaciones del libro Pecado Original. Clarín, los Kirchner y la lucha por el poder, de la periodista Graciela Mochkofsky podrían producir un profundo cambio en la causa que juzga la entrega de la empresa Papel Prensa a los diarios Clarín, la Nación y la Razón por parte de los militares de la pasada dictadura, después de la sospechosa muerte .de su dueño David Graive r en un accidente de aviación en México en 1976- Su viuda y la familia Graiver fueron detenidos por la dictadura y en esos momentos se produjo la entrega de papel Prensa a otras manos.

Un dictamen de la Unidad Fiscal de Coordinación y Seguimiento de causas por violación a los Derechos Humanos durante el terrorismo de Estado había considerado que la transacción que llevó la empresa de manos de la familia Graiver(perseguida por la dictadura) a la de los principales diarios en sociedad minoritaria con el Estado fue un delito de lesa humanidad.

En el libro la periodista Graciela Mochkofsky cita las declaraciones que mantiene en cintas grabadas (abril de 1998 y mayo 2002) con el ex secretario general de la Presidencia durante la dictadura, José Rogelio Villarreal, y con Patricio Peralta Ramos, ex director de La Razón”.

Villarreal le confirmó que la Junta Militar decidió que Papel Prensa pasara al dominio de los diarios Clarín, La Nación y La Razón. Esto fue confirmado en 2002 por Peralta Ramos.

Hasta ahora, los dueños del grupo Clarín y La Nación sostenían que los diarios decidieron aceptar la oferta formulada por el Grupo Graiver y que su participación terminó con la firma del convenio del 2 de noviembre de 1976 en las oficinas de La Nación.

Pero ya habían aparecido pruebas entre las que aportó Rafael Ianover y víctima de la familia Graiver que narraron como se trató de una extorsión en medio de torturas y amenazas sufridas en prisión por familiares.

Las confesiones que cita Mochkofsky, en su libro revelan el acuerdo delictivo de la Junta con los diarios y, fueron presentados al juez federal Daniel Rafecas, por la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación querellante en este caso.

Tres cintas grabadas podrían dar una vuelta de campana a la causa que instruye el juez federal Daniel Rafecas por la presunta comisión de crímenes de lesa humanidad en la adquisición de la empresa Papel Prensa señala el escritor y periodista Horacio Verbitsky.