Santiago, 31 de julio. La mina Collahuasi, tercera productora de cobre del mundo, reanudó sus operaciones hoy después de un paro de 24 horas en demanda de más beneficios y contra prácticas antisindicales.

Las operaciones se desarrollan normalmente y el cambio de turno de esta mañana se realizó en la forma habitual, luego que durante la tarde de ayer un pequeño grupo de trabajadores, liderados por dirigentes sindicales, intentaron detener las operaciones, señaló la empresa en un comunicado.

El sindicato entregó un pliego petitorio de diez puntos con demandas relacionadas con el desarrollo e interpretación del contrato colectivo, en cuanto a salud, control de asistencia, beneficios habitacionales, entre otras, y denunció la falta de claridad ante sus demandas por parte de la empresa.

Esperamos retomar las conversaciones (sobre el pliego petitorio) los próximos días, señaló una fuente del sindicato de trabajadores.

Collahuasi, propiedad de las compañías suiza Xstrata y la anglo-sudafricana Anglo American, es responsable de la explotación de cerca de 3 por ciento del cobre mundial, y produjo 504 mil toneladas del metal rojo en 2010, según datos oficiales.

Parelalamente, en la mina más grande del mundo, La Escondida, también situada en el norte de Chile, los trabajadores mantienen firme una huelga que este domingo llegó a los diez días en demanda de un bono por producción. Esta explotación es controlada por la firma angloaustraliana BHP-Billiton.

El conflicto aún no encuentra salida, lo que ha impulsado los precios globales del metal en los últimos días. Sin embargo, los trabajadores podrían levantar la medida de fuerza si la compañía eleva el monto del bono que demandan.

El bono en cuestión, que no está contemplado en el contrato colectivo, es la mayor divergencia entre las partes. Los trabajadores aspiran a que sea de unos 11 mil dólares. La empresa, controlada por BHP Billiton, les ha ofrecido cerca de 6 mil.

En los nueve días que lleva el paro, la mina La Escondida habría dejado de producir unas 27 mil toneladas de cobre, con un costo de 270 millones de dólares, según analistas.