Para el cantante Cox en la vida tiene que haber sal y pimienta; a veces lo que se queda en la mente es lo difícil, y sí, la vida tiene muchas caras, dijo en entrevista, antes de su concierto de ayer en el Teatro de la Ciudad.

Este domingo se presentó en el recinto de Donceles dentro de su gira El túnel del tiempo. Siento que estoy en un momento de transición total. Yo empecé con la idea de hacer versiones de grandes intérpretes y compositores, pero con el tiempo la gente identifica un estilo, que en mi caso es energético, con mucha dinámica. Creo que el intérprete tiene la obligación de estudiarse a sí mismo para que la gente vea un estilo en el escenario. Hoy todo ha cambiado con las redes sociales; antes todo eran entrevistas, para promoverse.

A beneficio de la Fundación Coleccionando Sonrisas

Cantó temas de él, de Reyli, de Aureo Baqueiro. Interpretó su versión de Una rosa roja, que Sandro cantó en los años 70, Al final, La distancia y Yo te amo, entre otros. Hizo algunos duetos con los españoles de Mac y tuvo una sección de metales integrada por músicos cubanos.

También se presentará en foros de Guadalajara, Monterrey y Tijuana.

Parte de lo que se recaudó de las entradas será donado a la Fundación Coleccionando Sonrisas, de la cual él forma parte y que tiene el fin de ayudar a niños pobres.