Alrededor de mil integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) marcharon ayer del Zócalo de la ciudad de México hasta la Torre del Caballito y de allí a la Secretaría de Gobernación, donde efectuaron un mitin y obtuvieron de las autoridades el compromiso de que el próximo jueves serán recibidos por el subsecretario Juan Carlos Rodríguez para discutir sus demandas en una mesa de negociaciones.

Desde abril los inconformes exigen cancelar las órdenes de arresto contra luchadores sociales y sindicalistas independientes del país y la aparición con vida de Carlos Román Salazar y José Guadalupe Pérez, profesores desaparecidos en marzo como represalia por su activismo social.

Además, demandaron abrogar la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado, que obliga a los maestros a cumplir 30 años de servicio a los hombres y 28 a las mujeres, además de fijar edad de jubilación ascendente a partir de los 51 años.

Los mentores rechazan la Alianza por la Calidad de la Educació, pues consideraron que quita trabajo a los normalistas, elimina los contratos definitivos y perjudica los principios básicos de la educación pública.

Epifanio Paredes, profesor de la sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), de Oaxaca, afirmó que el plantón nacional que los docentes instalaron en la Plaza de la Constitución busca presionar al gobierno para que atienda sus exigencias.

En Oaxaca, la sección 22 del SNTE finalizó ayer el paro de labores y el plantón que mantuvo dos semanas en el zócalo local, después de que el martes pasado aceptó la tercera oferta en materias económica, educativa y social que los gobiernos federal y estatal les hicieron.

Azael Santiago Chepi, secretario general seccional, sostuvo que aún hay demandas pendientes, entre ellas el castigo al ex gobernador Ulises Ruiz y demás responsables de la represión en 2006.

La suspensión de actividades, que inició el 23 de mayo, afectó a un millón 300 mil alumnos de 13 mil escuelas de prescolar, primaria, secundaria, media superior y superior.

Protestan dos mil integrantes de la sección 18 de Michoacán; cumplen 4 días de paro indefinido

Laura Poy Solano

Cerca de 2 mil integrantes de la sección 18 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, con sede en Michoacán, marcharon en la capital del país para exigir una respuesta a su pliego de demandas, que incluyen destinar mil millones de pesos adicionales para atender su petición de incremento salarial, basificación y rezonificación, así como incremento de recursos a programas de becas, uniformes, desayunos y útiles escolares, así como la atención a la infraestructura y equipamiento de los centros educativos.

Pese a que desde temprano se manifestaron ante la residencia oficial de Los Pinos para exigir pronta solución de las autoridades estatales y federales, tras cumplirse el cuarto día en paro indefinido de labores –que afecta a más de 700 mil alumnos–, Jorge Cázares, quien encabeza la disidencia de la sección 18, informó que sólo nos propusieron abrir una mesa de negociación la próxima semana, lo que es inaceptable.

Frente a esa negativa, centenares de maestros se trasladaron a la sede de la Secretaría de Educación Pública (SEP) donde formaron una valla humana que impidió la salida de trabajadores de la dependencia, así como de los secretarios de Educación de todo el país, quienes asistieron a la 24 reunión plenaria del Consejo Nacional de Autoridades Educativas.

Antes, Graciela Andrade, secretaria de Educación de Michoacán, demandó a la SEP y la Secretaría de Hacienda destinar 200 millones de pesos adicionales para atender las demandas del magisterio estatal, pues sería un gesto del gobierno federal con los estados que más han invertido en educación, tras reconocer que hasta la fecha no se tienen las condiciones para alcanzar un acuerdo con los docentes inconformes.

En tanto, los maestros disidentes, quienes el jueves salieron de Morelia rumbo al Distrito Federal, mantuvieron cercada la SEP más de dos horas, para exigir que nos reciba el secretario Lujambio y entienda que no es con 200 millones de pesos como vamos a solucionar el conflicto: podemos demostrar que se requieren al menos mil millones para atender las demandas más urgentes.

Por la tarde, representantes de la sección 18 y funcionarios de la dirección de personal de la SEP concretaron una reunión; los inconformes aseguraron que no vamos a ceder hasta que se escuchen nuestras demandas. Se prevé que este sábado se discuta el plan de acción que seguirán los docentes en una asamblea esta-tal que se realizará en Morelia, Michoacán.