El Canal Judicial se ha ido consolidando, paulatinamente, como un espacio único en su tipo; como una ventana para que la sociedad pueda observar el funcionamiento cotidiano del Poder Judicial y para que éste abra su proceder al escrutinio ciudadano, sostuvo el ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Juan N. Silva Meza.

Al encabezar ayer la ceremonia conmemorativa del quinto aniversario del canal, Silva Meza sostuvo que gracias a la transparencia por él provista, hoy la sociedad puede revisar detenidamente la labor de los juzgadores; puede escrutar que discutamos y resolvamos, con rectitud; con honorabilidad, con independencia, con imparcialidad, y eso no debemos cancelarlo, subrayó.

En el acto, que se llevó a cabo en la sede de la Suprema Corte, el ministro presidente agregó que, como bien público, el Canal Judicial contribuye a generar valor democrático: Apoya a la sociedad y al debate nacional, al prover información fidedigna e imparcial que la ayuda a involucrarse tanto en los temas nacionales como los internacionales.

El Canal Judicial cumple un lustro, como contribución decidida en favor de la transparencia en el ámbito jurisdiccional, sostuvo.

Las deliberaciones en que participamos, la forma en que argumentamos, los razonamientos que esgrimimos hoy pueden ser conocidas no sólo por los profesionales del derecho, los estudiantes y los involucrados en los casos que resolvemos, sino por todo ciudadano interesado en conocer cómo se interpretan sus derechos y se delimitan sus alcances, apuntó Silva Meza.

Durante la ceremonia se dio a conocer la conformación del Consejo Consultivo Interinstitucional, en el que participarán, entre otros, Héctor Fix-Fierro, director del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); Sergio García Ramírez, investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, y Soledad Loaeza Tovar, investigadora de El Colegio de México.

A nombre del Consejo Consultivo Interinstitucional, Sergio García Ramírez señaló que un consejo no es un cuerpo de testigos complacientes, sino un grupo de participantes libres y críticos, informados y solidarios, que agregan cuanto pueden a quienes hacen posible el trabajo del canal.

Aclaró que este canal no es el vocero del Poder Judicial, y tampoco se pone al servicio de una convicción partidaria, moral o religiosa. Es un proveedor de medios para el ejercicio de la libertad de los observadores, que no son clientes, sino ciudadanos.