El secretario de Educación Pública, Alonso Lujambio, rechazó que Ernesto Cordero sea el candidato de Felipe Calderón a la presidencia de la República, ya que en el PAN no existe la cultura de la cargada.

Sin embargo, el senador Santiago Creel, otro de los aspirantes a la candidatura presidencial del blanquiazul, advirtió que se vale sospechar en ese sentido, pero reiteró que los panistas no aceptarán cargadas, dedazos, ni bufonadas. Otros senadores de Acción Nacional, entre ellos Felipe González, Ramón Galindo y Judith Díaz, advirtieron que no todos están alineados con el titular de Hacienda.

Días después de que 134 panistas afines a Calderón manifestaron su apoyo a Cordero, y luego de que éste anunció que aspira a ser abanderado del PAN para las elecciones de 2012, el dirigente nacional del PAN, Gustavo Madero, aseguró que están garantizadas las condiciones de equidad para todos los contendientes.

“En Acción Nacional no hay dedazos ni candidatos oficiales, la contienda para 2012, será con piso parejo, expuso el responsable de elecciones del Comité Ejecutivo Nacional, el senador Rubén Camarillo.

Felipe González dijo que Cordero reúne los requisitos para ser candidato, pues además ha tenido un buen desempeño como funcionario, pero no todos en el partido están alineados con él.

La senadora Judith Díaz resaltó que es una carta más en la baraja de aspirantes del partido y su compañero de bancada, Ramón Galindo, advirtió que si se le impone como candidato oficial estará en desventaja frente a los demás contendientes.

Lujambio negó que esto indique una preferencia del Ejecutivo federal hacia el titular de Hacienda y rechazó que la llamada cultura de la cargada haya rebasado a Calderón. No, en mi partido no tenemos esa cultura y precisamente esa es la que combatimos por muchos años y no vamos a caer en ella, explicó al salir de Los Pinos, donde por segundo día consecutivo coincidió con el Presidente en una ceremonia.

Negó haber comentado con el presidente Calderón los tiempos de sucesión. Nosotros hemos hablado en términos generales durante varias semanas y no hemos hecho ninguna puntualización al respecto, aclaró.

En entrevista telefónica, Santiago Creel resaltó que en el PAN no van a decidir 134 personas, por más prestigiadas y méritos que tengan, sino el millón 700 mil militantes. Si así quieren ganar la elección interna, van a fracasar.

Insistió: Cada militante tiene un voto y decide libremente por quién votar. No necesita de ayudas, ni de consignas, menos de líneas de gobernadores, senadores o diputados. Todo esto está resultando extraño y va a ser rechazado.

Agregó que el panismo “no habrá dedazo, no habrá prácticas priístas, eso lo vamos a rechazar una y otra vez”, declaró durante una gira por Colima.

En Guanajuato, el dirigente nacional priísta, Humberto Moreira, dijo que si el secretario de Hacienda manifiesta que buscará la candidatura presidencial, seguramente habrá congruencia para dejar el cargo en cualquier momento, ya que es el hombre que maneja el dinero de todos los mexicanos. Agregó que el interés ya no está en Cordero, sino en quién será el próximo titular de Hacienda.

Al respecto, el dirigente panista Gustavo Madero consideró que pedir a Cordero que deje Hacienda ante su aspiración, es tanto como exigir a Enrique Peña Nieto que abandone su cargo de gobernador en el estado de México.

El dirigente panista resaltó en Saltillo, Coahuila –donde asistió a un mitin del candidato a la gubernatura, Guillermo Anaya–, que es curioso que el PRI vea la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio”. No se vale, agregó, que por un lado pida la licencia de Cordero pero no dice nada de Peña Nieto.

Claudia Herrera y Andrea Becerril, reporteras; Leopoldo Ramos y Juan Carlos Flores Carrillo, corresponsales