La Procuraduría General de la República (PGR) atrajo las indagatorias del homicidio del general de división retirado Jorge Juárez Loera, y dentro de las primeras líneas de investigación está la posibilidad de que su muerte haya derivado de un altercado vial o que la agresión de la que fue víctima hubiera sido planeada, revelaron fuentes ministeriales.

Juárez Loera fue agredido el sábado cuando circulaba en su automóvil sobre Circuito El Parque, en Naucalpan, estado de México, y al parecer discutió con los ocupantes de otro vehículo, quienes le dispararon en la cabeza. La delegación de la PGR en esa entidad inició a la averiguación MEX/NAU/III/2595A/2011 por el delito de homicidio.

Las primeras versiones señalan que Juárez Loera, uno de los militares de mayor experiencia en temas de narcotráfico y pionero del Operativo Chihuahua, circulaba en su automóvil en Ciudad Satélite. Según versiones de testigos que han declarado ante el agente del Ministerio Público mexiquense, aparentemente el mando militar tuvo un altercado vial con los ocupantes de otro vehículo, por lo cual el general descendió y abrió la cajuela; en ese momento recibió un balazo en la cabeza y después los atacantes huyeron.

A pesar de la versión inicial, familiares y conocidos del militar dijeron a reporteros que la agresión pudo haber derivado de otros motivos.

El cuerpo de Juárez Loera fue velado en las instalaciones militares de Lomas de Sotelo. En un acto privado, alrededor de 50 personas se congregaron para despedir a quien fue oficial mayor de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

El general, de 65 años, fungió como inspector y contralor general del Ejército y Fuerza Aérea y fue pionero del Operativo Chihuahua, como comandante de la 11 Región Militar. Combatió al crimen organizado en Coahuila, Veracruz, Querétaro, Aguascalientes, Sonora, Chiapas y Baja California.