Disfrutar y jugar con serenidad la final del futbol mexicano ante Pumas fue la orden principal que dio el técnico sancionado Tomás Boy, quien verá desde la tribuna a sus Monarcas.

Hay emoción más que nervios, afirmó el defensa Adrián Aldrete, previo al partido decisivo de este mediodía en el estadio Olímpico Universitario, al que los equipos llegan con marcador global de 1-1.

Creo que el nerviosismo se dejó en el primer duelo, al menos en lo particular, pero ahorita simplemente se disfruta. No siempre se juega una final y tengo que vivirla así, anotó Aldrete a la llegada del cuadro michoacano a un hotel al sur de esta ciudad.

El jugador se mostró convencido de que el entorno del encuentro, con la afición Puma, el estadio hirviente y la altitud, no serán factores adversos para Morelia como visitante.

“No creo que pese, la verdad. Siempre que venimos está lleno (el estadio): creo que será como otro partido, simplemente es una final, pero el público no tiene por qué influir.

En esta cancha es difícil, la altura, el horario, pero estos partidos se juegan con algo diferente: le pones un sentimiento distinto que te da para más. El equipo tiene hambre de conseguir un título y creo que llega así, con esa ambición y justamente eso nos puede ayudar, consideró.

Aldrete comentó que, de acuerdo con las recomendaciones que les ha hecho el técnico, la serenidad será el ingrediente fundamental para Morelia. Debemos salir tranquilos, saber qué es lo que nos ha traído hasta acá. No volvernos locos, no querer comernos el partido en 10 minutos; son 90 minutos que tenemos que aprovechar y manejarlo inteligentemente para que al final salgamos campeones.

Mencionó que se trata de dos equipos jóvenes, que les gusta hacer partidos veloces, por las bandas, por lo que se avizora un juego dinámico.

El también defensa Adrián García Arias destacó que el Morelia llega con la convicción de haber sido el mejor visitante del torneo regular, sólo que hoy de manera más inteligente. Se tiene que poner mucho el corazón y verse con esa copa en la mente, levantándola al término del encuentro, después de haber hecho un partido con mucho orden y mucha intensidad, señaló el jugador otrora campeón con el América.

Sobre la ausencia de Boy, quien apenas se dejó ver por algún pasillo del hotel, García Arias consideró que no será un factor adverso, aunque sí se le extrañará por su pasión y porque es un espectáculo aparte.

Por lo pronto, en el itinerario del equipo se contempla la posibilidad del triunfo, pues en ese caso ya está lista la logística para que, inmediatamente concluido el partido, tomen el avión y sean recibidos con un desfile que los acompañe desde el aeropuerto de Morelia hasta el centro de la capital.