En breve entrará en vigor un protocolo para la detección, identificación y atención de migrantes víctimas del delito. Este catálogo está dirigido a los agentes del Instituto Nacional de Migración (INM), organismo que ha iniciado un proceso de depuración.

El texto de la circular (independiente a la ley en la materia) en que se delimitan las tareas del personal del INM, ya fue autorizado por funcionarios del ramo que encabeza la Secretaría de Gobernación y sólo falta que se publique en el Diario Oficial de la Federación, lo cual podría ocurrir la próxima semana.

Desde abril pasado, cuando aumentaron las agresiones a migrantes, incluso por agentes del INM, según denuncias de víctimas, en Gobernación comenzó la elaboración del anteproyecto.

Esto también se debió a que en agosto de 2010 fueron hallados los cuerpos de 72 migrantes en un rancho de Tamaulipas, al parecer asesinados por sicarios.

Con base en lo anterior, la SG y el INM delinearon los puntos prioritarios de la circular ya revisada y autorizada por la Comisión Federal de Mejora Regulatoria:

1) Reconocer al extranjero como víctima, sin prejuzgar sobre la comisión de actos delictivos, y sin necesidad de que se identifique, aprehenda, enjuicie o condene al perpetrador, así como de la relación familiar que exista entre éste y la víctima.

2) Establecer el derecho a recibir asistencia migratoria, es decir, ser auxiliados e informados por la autoridad de las alternativas que le permitan permanecer en territorio nacional o ser repatriados a su país de origen.

3) Establecer el derecho de la víctima a ser referido a un albergue en el que reciba atención integral, especialmente médica y sicológica.

4) Si así lo desea, derecho de permanecer en territorio nacional con la calidad, característica y modalidad migratoria que más le convenga a sus intereses, con apego a la normatividad aplicable.

5) Derecho a la protección de su identidad y datos personales.

La “circular se publicará tras una gira de funcionarios del sector en la frontera sur.

En 2010, se registraron unos 2 millones de cruces por la frontera sur, de los que, según la SG, 140 mil fueron irregulares o indocumentados; de este número, el INM apresó en estaciones migratorias –mayoritariamente con fines de repatriación– a la mitad, casi 70 mil.

No hay cifras oficiales sobre del número de migrantes víctimas y se presume que hay un amplio subregistro de abusos que no son denunciados. Por ello, la circular destaca la confidencialidad del proceso.

El INM informó que en lo que va del año ha atendido 128 quejas presentadas ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos. Los agravios habrían sido cometidos por servidores públicos.