Ante el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la canciller Patricia Espinosa señaló que México sigue teniendo fe en el sistema multilateral, pero agregó que todos somos testigos del deterioro que sufren, día con día, la autoridad y la credibilidad de esta institución mundial.

La secretaria de Relaciones Exteriores dijo en ese foro que nuevas configuraciones internacionales, más informales pero acaso más efectivas, surgen y aportan soluciones a acuciantes problemas internacionales. Pensemos tan sólo en la respuesta del Grupo de los 20 a los desafíos de la crisis financiera de 2009, comentó.

En la reunión, que tiene lugar en Roma, por la Conferencia sobre gobernanza global y la reforma del Consejo de Seguridad de la ONU, la funcionaria indicó que México plantea ampliar el periodo de mandato de los actuales 10 países que son miembros electos del consejo de dos a cuatro años; incrementar en 10 el número de asientos no permanentes, y que “los países que son miembros no permanentes de este organismo tuvieran derecho a relección inmediata en esta instancia internacional, lo que permitirá mayor participación de los estados y favorecería la periódica rendición de cuentas frente a la Asamblea General.

La reunión a la que asistieron ministros de varios países estuvo encabezada por Franco Frattini, ministro de Asuntos Extranjeros de Italia; el embajador presidente de la Asamblea General de la ONU, Joseph Deiss. La canciller Espinosa indicó que hay un reconocimiento de todos los estados miembros de la ONU de que se debe adaptar esta organización a la exigencias, retos y expectativas del mundo actual, pues somos todos testigos del deterioro que sufren, día con día, la autoridad y la credibilidad de nuestra institución.

El grupo de países unidos por el consenso buscamos una solución basada en el acuerdo general, que ponga de manifiesto la voluntad de que nuestra organización (ONU) sea eficaz y esté a la altura de los retos que enfrentan nuestras sociedades, dijo Patricia Espinosa, y añadió que luego de varios años de discusiones y negociaciones se tienen acuerdos básicos al respecto, los cuales se pueden agrupar en tres grandes áreas y que son: la necesidad de aumentar la representatividad del Consejo de Seguridad; el mejoramiento de los métodos de trabajo y la transparencia del Consejo, y la rendición de cuentas frente al conjunto de la membresía de la organización.