En Cruz Azul trabajan, se ilusionan e imploran a Dios con el técnico Enrique Meza al frente, fervoroso católico que ya obtuvo un triunfo: imponer misas y rezos en las recientes semanas entre sus pupilos, reveló el delantero Emanuel Villa, quien el jueves jugó infiltrado ante Morelia y este domingo lo volvería a hacer para colaborar y lograr el pase a la final por el título del torneo Clausura 2011.

Tito confesó que tras la exhibición en el partido de ida de semifinales frente a Monarcas, “uno inconscientemente se ilusiona, sabe que tiene con qué. Ojalá podamos mantener un nivel parejito en la vuelta –olvidarse del 2-0 en favor– y saltar a la cancha como si estuviese empatado el marcador, y si Dios quiere, jugar la siguiente semana”.

Rechazó hacer castillos en el aire, pues sin fantasear ni pensar en nada raro veo un plantel completo. Hay materia prima, madurez, un técnico y jugadores que han sido campeones, han jugado en Europa, tenemos un equipo que a mi modo de ver es de los mejores de México.

En rueda de prensa en La Noria señaló que las modificaciones en el esquema le han sentado bien al equipo, aunado a la motivación tras arrancar con buen paso en la liguilla. Asimismo, pese al largo ayuno de 13 años sin título, dijo que los Cementeros se han sacudido la presión.

Villa resaltó que a diferencia de otras liguillas y tal vez gracias a no cargar con la etiqueta de favoritos, esta vez estamos jugando tranquilos, pacientes. Sabemos que nuestro equipo es uno cuando tiene el balón y otro sin él, pero debemos jugar con ese oficio cuando no lo tenemos; ponerse el cuchillo entre los dientes y correr, tratar de convertir si es posible, ser inteligentes.

Respecto de la fe religiosa, manifestó que las misas no eran algo usual, pero se hizo en las recientes semanas. Todo lo que pueda sumar y haga un bien al equipo en este tipo de finales es bienvenido. No es raro hacer una misa llegando al estadio o rezar todos en una ronda antes de salir a la cancha. Pedimos por la salud de cada uno, que nos vaya bien...

Me hago responsable: Vilar

El portero del Morelia, Federico Vilar, aceptó su error en el partido de ida ante La Máquina: Me hago responsable en lo que a mí corresponde. El (primer) gol es evitable, es un error, todos lo vimos: uno es el primero en darse cuenta. No me gusta dar excusas sino pensar para salir de este trance amargo.

El arquero admitió que una falla así por supuesto que te pega, pero debemos saber revertir la situación.

Y agregó: Tenemos que mejorar, nosotros como equipo dar mucho más y lo hemos podido hacer en varios momentos, en cada partido del campeonato y, si bien es ventaja tener dos goles, también nosotros podemos realizar un buen partido en casa para llegar a la final.