La producción de vehículos en México cayó 10.4 por ciento, con 152 mil 514 unidades producidas en abril respecto al mismo mes del año pasado, disminución atribuida a los festejos de Semana Santa y los efectos económicos del tsunami en Japón, mientras las exportaciones aumentaron 5.9 por ciento, con 141 mil 338 unidades vendidas, afirmó Eduardo Javier Solís Sánchez, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).

El representante del organismo indicó que el mercado interno automotriz no repunta, pues el consumidor se encuentra 27.2 por ciento abajo en cuanto a sus posibilidades de compra de bienes durables, ya que no existe certidumbre en el trabajo ni en los ingresos. El consumidor está posponiendo la compra de un bien durable para cuando pase la crisis, lo que significa que no hemos salido del todo.

La AMDA considera factores de impacto negativo en los consumidores la importación indiscriminada de automóviles chuecos de procedencia extranjera, la desconfianza y endeudamiento de los compradores y la crisis económica nacional e internacional.

Por su parte, Guillermo Rosales, presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores AC (AMDA), comentó que no hay suficiente clase media con el poder adquisitivo para obtener un bien durable y la economía no ha crecido para incorporar mejores ingresos a la población.

Indicaron que en el primer trimestre de 2011 las ventas internas fueron 20.4 por ciento inferiores a las realizadas en el mismo periodo de 2008. Sin embargo, esperan que durante 2011 el crecimiento económico siga mejorando.