Sabinas, Coah., 8 de mayo. Las carboneras que no estén sujetas a las normas de seguridad ni garanticen trato humano para sus trabajadores serán clausuradas, y los jornaleros recibirán una beca y capacitación para ser recibidos en empresas de mayor tamaño. En cambio, las que sí reúnan los requisitos hasta recibirán financiamiento federal, aseguró el secretario de Trabajo y Previsión Social, Javier Lozano Alarcón.

El funcionario advirtió que la muerte de 14 trabajadores dentro del pozo tres de la mina Beneficios Internacionales del Norte Sociedad Anónima (Binsa) no será en vano, pues aseguró que el gobierno federal no seguirá tolerando la ilegalidad laboral.

En conferencia de prensa ofrecida la madrugada del domingo, tras el rescate del último cadáver atrapado desde el martes en la excavación, el funcionario dijo que las empresas o empresarios que estén cumpliendo con la ley o estén dispuestos a cumplirla no tienen de qué preocuparse, pues las clausuras industriales y la cancelación de concesiones, que aseguró, comenzarán este lunes, serán sólo para las compañías que escatimen en la seguridad de los obreros.

Dijo que las dependencias involucradas en el tema de la minería, como las secretarías de Trabajo y de Economía, no pueden evadir la suspensión de actividades en empresas inseguras ante la posibilidad de que se perderán empleos, pues si ese fuera el argumento vamos a alentar todo tipo de trabajos al margen de la ilegalidad o vamos incluso a aplaudir a la delincuencia organizada para que le dé fuentes de trabajo a la gente.

Quien quiera cumplir con ley, añadió, va a tener la bienvenida, orientación, la comprensión y hasta la ayuda con financiamiento del gobierno federal; pero quien pretenda seguir violentando la Norma Oficial Mexicana 032 (donde se establecen los requisitos de seguridad para minas subterráneas) y no ofrecer las mínimas condiciones de seguridad y salud para sus trabajadores, desde el gobierno federal va a haber todo el rigor necesario para hacerlos cumplir.

Dijo que si la postura del gobierno federal lleva a cerrar empresas, que cierren las empresas, pero no vamos a seguir arriesgando vidas humanas porque algunos empresarios se quieren ahorrar unos pesos o dejar de invertir algunos pesos. Queremos carbón, pero no carbón que esté lleno de sangre.

Según la Dirección General de Minas de la Secretaría de Economía, en la cuenca carbonífera de Coahuila existen 150 minas verticales conocidas como pozos o pocitos, donde laboran unas 3 mil personas que en promedio reciben un salario semanal de mil 500 pesos.

Lozano admitió que en la zona funcionan compañías mineras que no invierten en las mínimas medidas de seguridad ni tienen registrados a sus trabajadores en los servicios de seguridad social, por lo cual serán clausuradas tal como ocurrió este domingo con los tres pozos que operaba Binsa en Sabinas.