odo está listo para recibir y marchar junto a las bases de apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), quienes se movilizarán hoy procedentes de la Selva, el Norte y Los Altos de Chiapas hasta la ciudad de San Cristóbal de las Casas, lugar en el que se manifestarán en atención al llamado realizado por el poeta y periodista Javier Sicilia, en el contexto de la marcha nacional por la justicia y contra la impunidad.

En Jovel crece la expectativa por la reaparición pública de los zapatistas en las calles. Desde febrero pasado rompieron el silencio mediante el inicio de un intercambio epistolar con el filósofo Luis Villoro, en el que fijaron su postura frente a la llamada guerra de Calderón: Esta guerra (que está perdida para el gobierno desde que se concibió, no como una solución a un problema de inseguridad, sino a un problema de legitimidad cuestionada) está destruyendo el último reducto que le queda a una nación: el tejido social, señaló en su momento el subcomandante Marcos, jefe militar y vocero zapatista.

A las calles de San Cristóbal vuelven los zapatistas luego de más de cinco años. La última vez que se manifestaron en Chiapas fue durante los bloqueos que realizaron en apoyo a la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), a mediados de 2006. Meses antes, el primero de enero de ese año, miles de sus bases de apoyo y simpatizantes llenaron la ciudad durante el inicio de la otra campaña.

La situación del país es otra. Hoy la movilización será para unir su voz (o su silencio, en este caso) a la gran protesta nacional contra la guerra impuesta por Felipe Calderón, quien ha convertido la lucha contra el crimen organizado en un argumento totalitario para, premeditadamente, generalizar el miedo en todo el país, y que ahora enfrenta las voces dignas y organizadas de familiares y víctimas de esta guerra.

Los zapatistas se movilizarán en silencio por vez primera en más de 17 años. Y lo harán así contra la locura organizada y desorganizada que está cobrando vidas inocentes, que son nuevamente asesinadas al ser calificadas por la simpleza gubernamental, como sicarios o víctimas colaterales.

Por lo pronto, mientras la marcha nacional que partió de Cuernavaca ya se encuentra en las inmediaciones de la ciudad de México, en Chiapas se concentrarán en el valle de Jovel desde temprana hora organizaciones y colectivos de la otra campaña, procedentes de las comunidades de Mitzitón, Cruztón y Bachajón, así como organizaciones e individuos de Tuxtla Gutiérrez e integrantes del Consejo Autónomo Regional de la Zona Costa, entre otras organizaciones que se unen a esta histórica y silenciosa movilización.

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