Los incendios sin control en las regiones carbonífera, centro, norte y sureste de Coahuila ya consumieron 282 mil hectáreas de vegetación (174 mil 304 de pastizales, 98 mil 897 de matorrales y 8 mil 798 forestales), e hicieron gastar inútilmente gran parte de los 440 millones de pesos destinados a los despliegues terrestres y aéreos para sofocarlos.

El delegado de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), Edgar Piñón, informó en la ciudad de Saltillo que ayer sábado seguían activas 10 conflagraciones en los municipios de Melchor Múzquiz, Ocampo, Ciudad Acuña, Castaños, Progreso y Arteaga.

A su vez Francisco Martínez Ávalos, secretario estatal de Medio Ambiente, dijo que las comunidades aledañas al ejido San Antonio de las Alazanas aún están amenazadas por los incendios de Arteaga, entre los cuales una ya devastó 600 hectáreas y se adentra en el bosque donde colindan Coahuila y Nuevo León, a pesar del esfuerzo de 370 brigadistas de ambos estados que también tratan de abatir las llamas desde cinco helicópteros que arrojan agua y químicos retardantes.

La mortandad de animales es incuantificable, pues no se sa- be si las numerosas familias de mamíferos residentes en la zona pudieron escapar, se guarecieron en madrigueras o quedaron atrapadas entre los incendios; pero entre los casos conocidos, este viernes una osa con graves quemaduras llegó a un campamen- to instalado a las faldas del cerro Santo Domingo del municipio de Castaños, y falleció cuan- do los brigadistas intentaron socorrerla.

Este sábado también se informó en Monterrey, Nuevo León, que el incendio iniciado al atardecer del viernes en el parque ecológico Chipinque del municipio de San Pedro, fue controlado por la mañana tras el despliegue de 230 brigadistas del Ejército, Protección Civil y la Conafor, entre otras dependencias; y aunque sólo dañó cinco hectáreas, el centro recreativo no reabrirá inmediatamente.

Activas, 14 focos en SLP

En San Luis Potosí las llamaradas que avanzaban en la sierra de San Miguelito fueron extinguidas pero hay otros 14 conflaggraciones activas en el territorio estatal, especialmente en los municipios de Alaquines, Tamasopo, El Naranjo y Ciudad del Maíz; mientras los damnificados que se refugiaron en albergues de la huasteca denunciaron la irrupción de bandas de saqueadores a las viviendas de zonas afectadas.