En vísperas de que se conmemore el Día Internacional del Trabajo, la Pastoral Laboral Nacional refrendó su rechazo a la reforma a la Ley Federal del Trabajo en el sentido que han propuesto PAN y PRI. Creemos que son más pertinentes y necesarias las modificaciones que nos pondrían al nivel del más alto índice internacional de derechos humanos laborales, y no lo opuesto.

Integrantes de dicha pastoral de Tampico, Monterrey, Puebla, Parras, Nueva Rosita, Barroterán, Palau, Torreón y Monclova que se reunieron el 17 y 18 de abril pasado, expresaron en un pronunciamiento que dieron a conocer ayer que los cambios que se proponen a la Ley Federal del Trabajo serían el tiro de gracia en contra de los derechos laborales que aún prevalecen.

Remarcaron que estos cambios marcan un sentido opuesto a lo expresado en el derecho internacional, pues precarizar aún más las condiciones laborales sólo beneficiará a los empresarios, en contubernio con algunos partidos políticos.

Destacaron también que a pocas horas de que Juan Pablo II sea beatificado sus pensamientos en torno al mundo del trabajo deberían ser tomados en cuenta por aquellos que profesando la fe católica respaldan las modificaciones.

La beatificación el primero de mayo de Juan Pablo II nos anima e inspira a hacer presente su pensamiento al respecto, mismo que deberá ser tomado en cuenta por los que respaldan esa modificación o para quienes son creyentes y se verán afectados, expuso dicha pastoral, la cual recordó lo expresado por el pontífice en su encíclica Centesimus annus: Una sociedad donde el derecho al trabajo sea anulado o sistemáticamente negado y donde las medidas de política económica no permitan a los trabajadores alcanzar niveles satisfactorios de ocupación, no puede conseguir su legitimación ética ni la justa paz social.

Aparte, en conferencia de prensa, integrantes de organizaciones sindicales independientes informaron que se espera la participación de unas 100 mil personas en la manifestación para conmemorar el Día del Trabajo, en la cual algunas de las demandas centrales serán contar con mejores salarios, garantía a la libertad sindical y rechazo a las modificaciones a la Ley Federal del Trabajo y a la aprobación de la Ley de Seguridad Nacional.

Benito Bahena, líder de la Alianza de Tranviarios, indicó que con la Ley de Seguridad Nacional México será un país militarizado y dictatorial, en el cual el gobierno va a aprobar las leyes que quiera y no vamos a poder decir nada.