Chilpancingo, Gro., 27 de abril. Marta Obeso, viuda del diputado perredista Armando Chavarría Barrera, demandó juicio político contra el ex gobernador Zeferino Torreblanca Galindo y los ex procuradores Eduardo Murueta, Albertico Guinto y David Sotelo, pues como servidores públicos desviaron las investigaciones en torno al asesinato de su esposo, ocurrido en agosto de 2009 en esta ciudad.

Obeso fijó la postura de la familia respecto a la desaparición del expediente del caso, lo cual fue denunciado el lunes pasado por el procurador general de Justicia local, Alberto López Rosas, y demandó al gobernador Ángel Aguirre cumplir con su promesa de campaña de llegar hasta las últimas consecuencias.

Marta Obeso señaló: “a todas luces es un asunto político (...) hoy no me quedan dudas. El crimen de Armando fue perpetrado desde el poder, desde esa mafia que sin importar alternancias sigue detentándolo y sirviéndose de él para defender sus privilegios.

Ahora resulta que el primer gobierno de alternancia democrático y de izquierda (de Zeferino Torreblanca) ha extraviado el expediente de un caso que conmocionó a la opinión pública estatal y nacional, el jefe de uno de los tres poderes de gobierno, expresó.

Acompañada de Azucena y Mirna Chavarría, hermanas del occiso, Obeso indicó que el de su esposo “fue un crimen de Estado, como lo calificaron los ciudadanos, los medios de comunicación y analistas políticos, que señalaron hacia el palacio de gobierno como el lugar donde se refugiaban los responsables intelectuales del mismo.

“Podemos imaginar cómo aprovecharon la noche para robarse la documentación del caso, borrando sus huellas, lavándose las manos con alcohol, recurriendo al fuego purificador para quitarse el olor a pólvora y arrancarse la sangre seca; imaginar a Zeferino Torreblanca y a sus empleados encerrados en un cuarto oscuro destruyendo documentos y vaciando computadoras como viles criminales.

Para eso es el poder, para que los grupos mafiosos que lo detentan decidan quién vive y quién muere, para oprimir a los ciudadanos, para quitar de en medio a quien estorbe y cubrirse con el manto de la impunidad; hoy recojo las palabras de Javier Sicilia, dolido por el asesinato de su hijo: ya basta de violencia, ya basta de impunidad, recalcó.

Sentenció que no quiere pensar que pudieran darse negociaciones en altas esfera del poder para proteger a los que se han ido, y dijo que la única manera de demostrar que no las hay es enjuiciar a los criminales que se escudan en la ley.

Descartó que guerrilleros haya asesinado al ex diputado perredista porque Armando (Chavarría) no perteneció a ningún grupo guerrillero como para decir que el EPR lo haya ajusticiado por supuestas desviaciones ideológicas, eso es falso.

Mirna Chavarría, hermana del finado, demandó audiencia con el gobernador Ángel Aguirre para solicitar que se recupere el expediente original; se exploren todas las líneas de investigación, se repongan todas las actuaciones ministeriales y se consigne a los responsables intelectuales, materiales y partícipes del homicidio.