El deslizamiento mensual de esos precios ha sido un ancla
inflacionaria, afirmó
La apreciación del peso, por el exceso de liquidez en mercados internacionales
, sostuvo
Lunes 25 de abril de 2011, p. 23
Aunque en el presupuesto original el gobierno tenía previsto un subsidio a las gasolinas de 36 mil millones de pesos, la inestabilidad internacional en el precio de los energéticos ha provocado que en un contexto de elevados precios el subsidio alcance los 100 mil millones de pesos, informó el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Ernesto Cordero, quien consideró que en México se vende una de las gasolinas más baratas del mundo. Aunque en sus estimaciones no en todo 2011 se mantendrá esta tendencia internacional, dijo que la estrategia de deslizamiento mensual controlado de esos precios ha sido, en este contexto, un ancla
inflacionaria.
Durante una rueda de prensa en Palacio Nacional, Cordero sostuvo que las proyecciones de crecimiento de la economía mexicana se mantienen entre 4 y 5 por ciento, al tiempo que rechazó que vayan a alterar las estimaciones de crecimiento nacional los efectos de los señalamientos de Standard and Poor’s al elevado déficit fiscal de Estados Unidos y las previsibles acciones de ese gobierno. Sostuvo que, más allá del enorme déficit de las finanzas estadunidenses y las acciones que implicarán comenzar a reducirlo, es un factor que ha sido considerado entre las variables que incidirían en las proyecciones económicas mexicanas.
Consideró que se han magnificado los efectos que pudiera tener en la economía internacional el abultado déficit estadunidense, pero no porque la situación no sea un problema serio, sino porque esta información es bien conocida desde hace tiempo. Destacó la importancia para la viabilidad de la economía mundial que Estados Unidos comience a aplicar acciones para corregirlo.
Se refirió a la tendencia de apreciación del peso, la cual atribuyó al exceso de liquidez en los mercados internacionales
, que por ahora se están canalizando a las economías emergentes, pero en especial hacia aquellas donde existe estabilidad económica que, dijo, es el caso de México. Además, las tasas de interés del país, que se ubican por arriba de economías desarrolladas, han captado mayores capitales que inciden en el precio del peso.
Sin embargo, aseguró que cuando Estados Unidos modifique su política para ajustar su economía y eleve las tasas de interés, se moverán de nueva cuenta los capitales y eso implicará un proceso natural de depreciación que tampoco será el fin del mundo
ni la pérdida de poder adquisitivo. Reivindicó la estrategia de flotación del peso que, opinó, ha permitido absorber choques externos sin los efectos que tenían las devaluaciones.
Subrayó que en el arranque de 2011 las variables económicas alientan un buen pronóstico: la inflación anualizada a abril es de 3.21 por ciento, la producción industrial al primer bimestre aumentó 5.9 por ciento, las manufacturas, 7.9 en ese periodo, en tanto la industria de la construcción lo hizo 6.3 por ciento y la automotriz, 27 por ciento.
Cordero consideró que el subsidio a las gasolinas, producto de los elevados internacionales, ha tenido un costo social enorme
en la medida en que se desvían recursos que se deberían canalizar a la construcción de infraestructura de salud y de educación.
Destacó que es claro que el deslizamiento del precio en México está por debajo de los movimientos a nivel internacional, vamos a estar en un contexto de precios elevados, hay pocas cosas que sean más inestables y volátiles que los precios de los energéticos a nivel internacional
.
Al referirse a otro de los efectos de la fluctuación en las cotizaciones de los energéticos, que son los excedentes petroleros, destacó que es mala idea asumir que siempre tendrán un comportamiento como el actual, y subrayó que la ley prevé el destino de dichos excedentes: infraestructura de Pemex, infraestructura de estados y ahorrar en épocas de vacas gordas y aplicarlo cuando haya vacas flacas
.