La situación de violencia que vive el país es muy dura, pero la vamos a superar, afirma el doctor Federico Ortiz Quezada (Distrito Federal, 1935), quien presenta su nuevo libro Consciencia (Taurus), alegato en favor del universo, de la Tierra, de la vida, de la maravilla que somos.

En charla con La Jornada explica que, si bien él no votó en 2000 y 2006 por los candidatos del PAN a la Presidencia, usa el plural porque es mexicano al proponer: tenemos que reparar el daño de nuestra equivocación, tenemos que echar para atrás para poder seguir adelante. México no es un Estado fallido, porque tiene siglos de historia, de arte, de cultura.

La conciencia, uno de los temas de vanguardia en medicina, es definido por el también autor de Muerte, morir, inmortalidad (2005) como la suma o articulación de muchas cualidades del ser humano, como la inteligencia, la reflexión, la sensibilidad, las emociones; lo que nos hace diferentes.

En México, añade, “tenemos mucha conciencia en cuanto al análisis del bien y del mal, pero poca en el sentido de la advertencia; esto lo digo por los políticos, quienes no tienen ni idea de lo que es tener conciencia.

“No es porque sean malas personas o perturbados mentales –aunque muchos lo son–, sino que simplemente son seres inconscientes. Por un lado, el poder perturba las emociones, pero por otro lado son personas que han llegado sin conocimiento histórico, político, social o de relaciones públicas. Llegan por accidente, como el grupo Atlacomulco, que por el simple hecho de que alguien es de esa familia ya le otorgan poder, no le exigen ni lo obligan a estudiar.

“La mayor parte de nuestros políticos, como Vicente Fox, ni siquiera saben leer; ahorita el PAN ha cometido el grave error de incorporar a personas muy ignorantes de la realidad social del país, eso lo dice todo mundo, incluso ellos.

Lo hemos visto en todas las esferas: son personas que no tienen ni idea. Por eso México está tan mal. Eso da pena, porque el país cuenta con talento. En la medida en que los ciudadanos sean conscientes de esto, habrá un cambio.

Ortiz Quezada se graduó en 1959 como médico cirujano en la Escuela Nacional de Medicina, realizó su posgrado en urología en el Hospital General de la ciudad de México y en la Universidad de Cornell, en Nueva York.

Es miembro del Comité de Ex Profesores del Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional Siglo XXI; el quirófano de trasplantes de ese hospital lleva su nombre, en reconocimiento a que fue pionero en la práctica de trasplantes de órganos, y se le considera el fundador de la urología moderna en el país.

Considera que México no tiene una política a la altura del arte y la cultura que se producen, “porque nos desentendimos. La política es algo que debemos hacer todos los ciudadanos para la construcción de un país, pero aquí la dejamos en manos de ignorantes. Por eso tuvimos una especie de monarquía partidaria y nos fuimos desentendiendo, no participamos y eso convino a los dirigentes políticos, porque no hubo posibilidad de que se les quitara del cargo. Hemos dejado que ellos manejen la política.

“Un ejemplo es la falta de interés hacia la Secretaría de Educación Pública: no quieren que seamos educados, que tengamos noción de las cosas.

Ahora, con todo lo que pasó a partir de 1988, nos estamos interesando otra vez en quiénes son los candidatos. Si bien los procesos sociales son lentos, confío en que habrá un cambio, en que seremos conscientes de que éste ya es necesario, concluyó el doctor Federico Ortiz Quezada.