Martes 19 de abril de 2011, p. 9
Las lluvias del sábado pasado causaron daños a la nueva sede del Senado. Se inundaron el salón de plenos, la presidencia de la mesa directiva, las vicepresidencias y otros órganos de gobierno.
El edificio, que costó casi 2 mil 600 millones de pesos, fue inaugurado el miércoles pasado, pero desde el inicio de los trabajos de la sesión ordinaria hubo fallas en el audio y en la pizarra de votación.
Ayer se iniciaron trabajos para contener las siguientes precipitaciones. Los obreros que realizan las tareas explicaron que se inundó el salón de plenos, que el agua llegó a las curules –importadas de Italia– y que la lluvia afectó la oficina del presidente del Senado y las vicepresidencias.