Cuernavaca, Mor., 17 de abril. A 21 días del multihomicidio que conmocionó y movilizó a la sociedad morelense, el gobernador Marco Antonio Adame Castillo y el Congreso local plantearon la conformación de un gran acuerdo de unidad por el desarrollo, la seguridad, la justicia y la paz en Morelos, que restituya la confianza en las instituciones, tal como demandó para todo México el poeta Javier Sicilia, cuyo hijo Juan Francisco fue una de las siete víctimas.

En su discurso durante la sesión solemne por el 142 aniversario del estado de Morelos, el gobernador admitió que se viven momentos difíciles que obligan a la unidad y a dejar de lado intereses personales o políticos, y se sumó al llamado del Congreso, que expresó con generosidad y compromiso la más amplia disposición de construir un gran consenso para lograr mayores y mejores avances en favor del desarrollo, la paz, la justicia y la seguridad de los morelenses.

El país y el estado, dijo, “enfrentan un momento de la historia en que están a prueba tanto las instituciones y leyes que nos hemos dado, como la capacidad de diálogo y acuerdo que permitan la participación corresponsable de todos, a fin de integrar –en el segundo caso– la agenda de un Morelos más justo y seguro; pero lograrlo exige sobreponer las más altas y nobles aspiraciones de un pueblo lastimado y agraviado por los violentos y los delincuentes que pretenden arrebatarnos nuestro futuro”.

Durante la alocución del gobernador panista, el diputado Fidel Demédicis (del Partido de la Revolución Democrática) mantuvo una cartulina con la leyenda: Calderón responsable de la tragedia nacional; Adame responsable de la estatal.

Antes, el presidente de la mesa directiva del Congreso, Julio Espín Navarrete, convocó a crear condiciones para generar crecimiento, impartir justicia y acabar con la inseguridad y violencia que azotan el estado, con medidas como un sistema operativo de denuncias anónimas, policías confiables y eficientes, un fondo de atención a víctimas del delito y la revisión exhaustiva de la Procuraduría General de Justicia estatal, porque no se necesitan más cárceles sino menos delincuentes, ni más leyes sino cumplir las existentes.

Pidió hacer un alto para enmendar errores y devolver a los ciudadanos la confianza y la tranquilidad, y convocó a todos los involucrados a consolidar el gran acuerdo, al que también se sumó el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Miguel Ángel Falcón.

Al término de la ceremonia, el procurador general Pedro Luis Benítez Vélez, dijo que el joven detenido y presentado por el Ejército la noche del jueves 14 –quien apareció severamente golpeado y admitió haber participado en el levantón de cuatro de las siete víctimas– fue puesto a disposición de la Procuraduría General de la República (PGR), y será un juez quien determine si participó en los hechos.

Cuando ellos concluyan los interrogatorios e indagatorias nosotros podremos opinar, dijo respecto de las discrepancias entre las procuradurías estatal y la federal sobre el asesinato del joven Sicilia y otras seis personas, cuyos cadáveres aparecieron el 28 de marzo en el municipio de Temixco.

Se le insistió en que, según los militares, al detenido lo entregó el cártel del Golfo, y conforme a su testimonio, los hechos ocurrieron en otro lugar y con un móvil distinto al que presumió la procuraduría, a lo que repuso: Nosotros actuamos con juridicidad, y cuando se integren los trabajos de la PGR podremos ver si esas declaraciones son indicios, presunciones o pruebas concluyentes.

Sobre los cuestionamientos de organizaciones sociales que desconfían de la investigación estatal y sostienen que el detenido es un chivo expiatorio, Benítez Vélez no quiso contestar, porque serán, dijo, los jueces quienes lo determinen.