En Quintana Roo 17 incendios activos ya devastaron 800 hectáreas de vegetación. Sólo uno abarca 350 cerca del aeropuerto de Cancún, pero está casi controlado; el de la Reserva de la Biosfera Sian Kaan ya dañó 250 e incluso puede introducirse a la región selvática. Otro avanza en Majahual, municipio de Othón P. Blanco.

Personal especializado combate todos los incendios y ninguno de ellos pone en riesgo a la población, pero se monitorean permanentemente las zonas vulnerables y brigadistas que se hallaban en Majahual fueron transferidos a Sian Kaan para reforzar las maniobras, dijo ayer en Cancún –cabecera del municipio de Benito Juárez– el delegado estatal de la Comisión Nacional Forestal, Julián Escamilla Nava.

En Coahuila 758 brigadistas combaten los incendios al norte de la entidad con ayuda de 17 aeronaves, entre ellas el Boeing 747 que hace descargas de agua y químico retardante de 76 mil litros cada una, dijo el secretario estatal de Medio Ambiente, Francisco Martínez Ávalos.

Del total de aeronaves –informó a su vez la Secretaría de Medio Ambiente federal– el sábado entraron en operación dos Air Tractor y este domingo se añadirán los Hércules C-130 enviados por la fuerza aérea de Estados Unidos junto a 400 nuevos brigadistas; mientras la superficie siniestrada continúa en 103 mil 885 hectáreas y la conflagración fue sofocada en Ocampo y Arteaga pero sigue activa en los vecinos municipios de Múzquiz y Acuña.

En respaldo a las operaciones la Cruz Roja dispuso 30 ambulancias con unos 300 socorristas en zonas aledañas a los incendios y atendió hasta el momento más de 30 personas afectadas.

En el estado de México, más de 2 mil incendios consumieron 5 mil hectáreas forestales, y entre los aún activos uno ya devastó casi cien de ellas en la zona de Jilotzingo, dijo el secretario de Medio Ambiente del estado, Gustavo Cárdenas Monroy. “¡Bendito Dios que comenzó a llover! –exclamó–, pues la capacidad de respuesta de las autoridades y la sociedad ya estaba rebasada”.

Con información de Carolina Gómez y Notimex