La política que no está en los medios, simplemente no existe, aseguró el catedrático en sociología especialista en medios, Manuel Castells Oliván, de la Universitat Oberta de Catalunya.

Al ser nombrado miembro correspondiente de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), el investigador sostuvo que los medios de comunicación masiva representan el espacio donde se forma el poder.

Indicó, sin embargo, que en la red global ya no hay dueños absolutos de la información y los usuarios la modelan de forma libre con la mente.

Castells –doctor honoris causa por la Universidad de Sevilla– ha dedicado la mayor parte de su obra al estudio de la sociedad de la información, a través de analizar los cambios económicos, sociales y culturales que transforman al mundo a gran velocidad.

Durante una conferencia en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, habló de su libro Comunicación y poder.

Aseguró que los fenómenos sociales y políticos crean redes de significados, lo que en un contexto de crisis de información con sucesos internacionales, por falta de presupuesto, se hacen más locales.

“La tecnología de redes y la organización en red son sólo medios que reflejan las tendencias inscritas en la estructura social.

El actual proceso de globalización tiene su origen en factores económicos, políticos y culturales, pero las fuerzas que impulsaron la globalización sólo pudieron desencadenarse porque tenían a su disposición la capacidad de conexión en red global, la cual proporcionan las tecnologías digitales de comunicación y los sistemas de información.

El catedrático aseveró que todos los medios masivos están sesgados, toda vez que ganan audiencia e influencia política con el propósito de obtener concesiones gubernamentales.

Asimismo, el especialista habló de la autocomunicación de masas, de la crisis de legitimidad del Estado y la relación de éste con la sociedad, así como de la economía, que, dijo, constituye la clave para entender situaciones de inflexión.

Finalmente, Castells se dijo profundamente honrado de ser miembro correspondiente de la AMC.

Mi forma de agradecer es intensificando el rigor científico y compartiendo la investigación.