El movimiento Tawhid wal al Yihad niega estar implicado
Sábado 16 de abril de 2011, p. 23
Gaza, 15 de abril. Un grupo salafista aún desconocido asesinó al pacifista italiano Vittorio Arrigoni horas después de haberlo secuestrado en la franja de Gaza, anunció este viernes el movimiento islámico Hamas, que prometió perseguir
a los autores de este crimen atroz
e inédito en el territorio palestino que controla.
El jueves pasado, militantes de un grupo salafista palestino en Gaza anunciaron el secuestro de Arrigoni, periodista, escritor y militante italiano del grupo pacifista pro palestino Movimiento de Solidaridad Internacional.
Los plagiarios amenazaron con matar a su prisionero cuando expirara el ultimátum que dieron, hasta hoy por la tarde, para la liberación de sus compañeros prisioneros, en especial el jeque Hicham Saedini, líder del grupo salafista Tawhid wa al Yihad.
Sin embargo, Arrigoni, de 36 años, fue asesinado antes y su cadáver fue encontrado la noche del jueves anterior, indicaron los servicios de seguridad de Hamas.
Arrigoni apareció ahorcado en un barrio del noroeste de la ciudad de Gaza, informó Hamas. Dos de sus presuntos secuestradores fueron detenidos.
El grupo Tawhid wal al Yihad negó haber cometido el asesinato, que calificó de resultado natural de la política de represión ejercida por Hamas y su gobierno
.
El presidente italiano, Giorgio Napolitano, condenó el asesinato de Arrigoni, que calificó de crimen repugnante y bárbaro
, en tanto que la comisaria de Relaciones Exteriores de la Unión Europea, Catherine Ashton, describió el crimen como ”deplorable”.
Los salafistas quieren crear en la franja de Gaza un Estado islámico. Los secuestradores justificaron sus actos diciendo que Arrigoni había llegado a Gaza para corromper a los palestinos.
Hasta el cierre de esta edición no se había dado a conocer el grupo que perpetró el homicidio.
Por otra parte, el Senado estadunidense aprobó una resolución que reclama a la Organización de Naciones Unidas anular el informe Goldstone que acusó a Israel de crímenes de guerra
, luego de que su autor reconoció haber afirmado erróneamente que Tel Aviv atacó intencionalmente a civiles.