Detención de tres camionetas cargadas de madera y secuestro de ocupantes desató la riña
Habitantes de Cherán acusan a autoridades de solapar a la mafia
de Capácuaro; el pueblo dijo ya basta
y está dispuesto a levantarse en armas
, afirman
En la refriega 5 vehículos fueron baleados
Sábado 16 de abril de 2011, p. 28
Morelia, Mich., 15 de abril. Un herido de bala, por lo menos tres personas retenidas, tiroteos, vehículos baleados, bloqueos carreteros y la amenaza de levantarse en armas
contra la autoridad local es el saldo de un enfrentamiento entre comuneros del municipio de Cherán con presuntos talamontes de la comunidad de Capácuaro.
Los hechos comenzaron alrededor de las 5:30 horas de este viernes en el punto conocido como El Calvario, ubicado en la meseta purépecha, donde unos cien comuneros detuvieron tres camionetas cargadas con madera y retuvieron a por lo menos tres ocupantes de esas unidades.
En la huida, el resto de los presuntos talamontes prendieron fuego a la zona boscosa y se enfrentaron a balazos con los comuneros. En la refriega, cinco vehículos fueron baleados y un habitante de Cherán recibió un impacto de bala en la cabeza, siendo trasladado a un hospital de esta capital; su estado fue reportado como crítico.
Los talamontes retenidos fueron llevados al centro de Cherán, donde estuvieron a punto de ser linchados. Habitantes de ese municipio expresaron que están hartos y fastidiados
por la tala clandestina que la autoridad solapa; el pueblo dijo ya basta y está dispuesto a levantarse en armas porque la policía está coludida con la mafia y Cherán está olvidado
, dijeron.
Afirman que organizaron un grupo de 15 personas armadas para vigilar los accesos a la zona, ante la posibilidad de que arriben habitantes de la comunidad de Capácuaro.
En tanto, indígenas de Santa Cruz Tanaco y Aranza, que también han tenido problemas con la comunidad de Capácuaro, bloquearon las carreteras que comunican a Zamora y Paracho, para impedir que llegaran más refuerzos, según la Procuraduría General de Justicia del Estado.
Ante la emergencia, las secretarías de la Defensa Nacional, Seguridad Pública de Michoacán, Policía Federal y Procuraduría General de Justicia del Estado aplicaron un operativo terrestre y aéreo para atender
el conflicto.
Sin embargo, los elementos de esas corporaciones sólo cercaron la zona limítrofe de Cherán. Hasta el cierre de esta edición, soldados y policías permanecían en el sitio porque en la plaza principal del municipio unas mil personas armadas con pistolas, machetes, palos y piedras estaban listas para reiniciar los enfrentamientos.
El conflicto entre estas comunidades ha sido recurrente en la última década, debido a que Capácuaro ya no cuenta con recursos forestales, y sus habitantes suben a los bosques de las comunidades cercanas a talar árboles y robar madera.
La región de la meseta purépecha ha perdido más de 60 por ciento de su arbolado, y en esta zona como en Charapan, Paracho, Nahuatzen, Zacán y Uruapan, existen más de 2 mil 500 talleres de madera clandestinos, según la Comisión Estatal Forestal.