El grupo parlamentario del PAN en la Cámara de Diputados firmó ayer la iniciativa del PRI en materia de reforma laboral, en un gesto que, explicó la coordinadora Josefina Vázquez Mota, tiene como propósito no dejar ningún pretexto para aprobar un marco moderno en las relaciones del trabajo.

En conferencia de prensa, en la que públicamente signó la propuesta priísta, Vázquez Mota acusó al tricolor de pretender chantajear a la Cámara de Diputados al no aceptar la iniciativa sólo porque está de por medio la elección para gobernador en el estado de México.

La panista rechazó que la insistencia en votar las modificaciones se deba a un interés personal o político, en momentos en que recorre el país para sostener reuniones con diputados estatales del PAN y simpatizantes.

Afirmó que si bien el proyecto que presentó en abril del año pasado el diputado Gerardo de los Cobos –conocido como ley Lozano– es más completo que el de los priístas, están dispuestos a retirarlo y el dictamen se apruebe únicamente a partir del documento del Revolucionario Institucional.

De los Cobos, quien es secretario de la Comisión del Trabajo, reconoció que ambas iniciativas coinciden en aspectos fundamentales de la reforma, como la contratación temporal, empleos sujetos a la capacitación y la subcontratación de personal o outsourcing.

Sin embargo, Vázquez Mota acotó que el respaldo del blanquiazul al proyecto de los priístas tiene como vigencia el 30 de abril, cuando termina el actual periodo de sesiones.

Concluida la conferencia, Arturo Ramírez Bucio, delegado de la Secretaría del Trabajo en Zacatecas cuando Carlos Abascal dirigía la dependencia, desde su curul blandió la carpeta con el proyecto priísta y las firmas de los diputados de Acción Nacional, y exigió que la reforma se apruebe cuanto antes.

El presidente en turno de la mesa directiva, el cetemista Amador Monroy, atajó que en ese momento el tema en la sesión no era el de la Ley Federal del Trabajo.

Como el martes, y contra sus usos políticos, los panistas volvieron a desplegar la manta que exhibieron en la tribuna, en la que se lee: Faltan 18 días. ¿Y la reforma laboral cuándo? Corriendo, De los Cobos subió a la tribuna para pegar un número 7 sobre el 8, para actualizar el mensaje.

Desde su curul, el vicecoordinador del PRI, José Ramón Martel, reviró: “hay un viejo dicho: ‘No por mucho madrugar amanece más temprano’. Ley laboral la habrá… a su tiempo. Pero escuchando a quienes aún tienen deseos de aportar”.

En el otro extremo del salón, el vicecoordinador del PAN, Alberto Pérez Cuevas, demandó hablar para responder al priísta. Amador Monroy insistió en que el tema no estaba a debate, y el panista le gritó: ¡Me da la palabra o me la tomo!

Pérez Cuevas refirió que hace 40 años, durante la presidencia de Luis Echeverría Álvarez y cuando el diputado Porfirio Muñoz Ledo (PT) era secretario del Trabajo –en 1971–, se aprobó aquella ley histórica del trabajo, y que ahora el tricolor deshonró su palabra. Lo que está frenando la reforma laboral es el proceso electoral en el estado de México.

Los panistas reprocharon que las organizaciones afiliadas al Congreso del Trabajo –el sector obrero del PRI– hayan ampliado al 18 de mayo las consultas con organizaciones sindicales, de abogados laborales y organizaciones civiles. Ayer, sin embargo, iniciaron las audiencias con la dirigencia de la Unión Nacional de Trabajadores y la Asociación Nacional de Abogados Democráticos.

El próximo encuentro está previsto hasta el 25 de abril, cuando participarán los sindicatos de las federaciones textil, refresquera y alimenticia, así como la Vanguardia Obrera y Coordinadora Sindical del Estado de México.