Agentes policiacos hallaron este miércoles en la carretera Ciudad Juárez-Casas Grandes cuatro cadáveres que corresponderían a jóvenes levantados por policías municipales el pasado 26 de marzo. Asimismo, en nueve estados se documentaron 29 asesinatos presuntamente vinculados con el crimen organizado, entre ellos el de Federico de Luna, coordinador de seguridad del palenque de la feria de San Marcos, en Aguascalientes.

En Juárez, familiares de cuatro jóvenes privados de la libertad el mes pasado en esa fronteraez vieron cuando los cadáveres –que llevaban las manos atadas a la espalda– fueron desenterrados, y dijeron reconocerlos por sus ropas.

Los cuerpos fueron encontrados a partir de que un automovilista se quedó atascado en arena a la orilla de la carretera Ciudad Juárez-Casas Grandes, a la altura del kilómetro 30, y percibió olores producto de la descomposición de los cadáveres, que estaban semienterrados.

En tanto, un juzgado oral encontró evidencias para iniciar juicios contra los agentes adscritos al Grupo Delta de la policía municipal juarense Eugenio De los Santos Decuesta, Francisco Javier Campoy Domínguez y Leonardo Iván Loya Hernández, a quienes se acusa de desaparición forzada, abuso de autoridad y robo de vehículo en agravio de Juan Carlos Chavira, de 28 años de edad; Dante Castillo de la O, de 25; Raúl Navarro, de 29, y Félix Vizcarra, de 22 años.

En este contexto, ayer se dio muerte en Chihuahua a seis personas, cuatro de ellas en Juárez, incluyendo a la oficial de la policía municipal Paola de la Rosa García, de 30 años de edad, quien fue asesinada en su domicilio de la colonia Adolfo López Mateos.

Otra presunta víctima de la delincuencia organizada fue el coordinador de seguridad del palenque de la feria de San Marcos, Federico de Luna Guerrero, de 34 años, asesinado al mediodía del miércoles cuando llegaba a su casa en el fraccionamiento Villa Sur, al sur de la capital de Aguascalientes. Sobre el cadáver se descubrió un mensaje escrito en un trozo de cartón.

Los homicidas de De Luna Guerrero viajaban en una camioneta Ford Windstar color dorado, y se emparejaron a su víctima cuando ésta estacionó su camioneta Ford Lobo sin placas frente a su casa, en la esquina de Jorge Negrete y Siglo XXI. La persona ejecutada recibió más de 20 balazos de armas calibres 40 y 9 milímetros.

Además, Eladio Guzmán López, agente de la policía ministerial de Sinaloa, fue encontrado decapitado ayer por la madrugada sobre el puente Miguel Hidalgo, en Culiacán. En la misma entidad se registraron ayer otras siete muertes violentas.

Cuatro de los asesinatos cometidos el miércoles ocurrieron en Durango; hubo otros cuatro en Guerrero, tres en el estado de México, uno en San Luis Potosí, uno en Nuevo León y uno más en Jalisco.

Por otro lado, en Sinaloa, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) informó que se hallaron 13 cadáveres en ocho fosas clandestinas descubiertas el martes en las cercanías de la comunidad Bachomobampo, en el municipio de Ahome, todos con tiro de gracia y sepultados hace al menos cinco meses, informó el titular de la dependencia, Marco Antonio Higuera.

El procurador señaló que las labores de investigación se concentran en la identificación de las víctimas, dos de ellas mujeres. Miembros de unas 200 familias se reunieron en las oficinas de la PGJE sinaloense en Los Mochis, cabecera municipal de Ahome, y en el lugar donde se encontraron los cadáveres, con el objeto de ver si eran parientes suyos desaparecidos.

Con información de Notimex