Cancún QR, 12 de abril. Dos días después de asumir la presidencia municipal, Julián Ricalde Magaña anunció el despido de al menos 500 trabajadores y dijo que regidores de la nueva administración lo están presionando para que les permita mantener grupos de asesores y para obtener apoyos económicos incongruentes.

El edil perredista dijo que en el pasada gestión hubo regidores, entre ellos el priísta Víctor Viveros, que cobraban hasta 250 mil pesos mensuales, tres veces más que lo aprobado, y advirtió que eso no sucederá en su administración.

Explicó que una de las primeras medidas para sanear las finanzas será la reducción de la nómina, que consume casi 60 por ciento del presupuesto anual.

Creo que el ayuntamiento debe prescindir de al menos unas 500 personas inicialmente, dijo Ricalde Magaña al poner en marcha una obra de pavimentación. Comentó que el gobierno local no tiene finanzas sanas, sino una mala calificación crediticia y una nómina abultada, lo cual limita la posibilidad de hacer obra pública. Agregó que ya se pidió la renuncia a los trabajadores de confianza de la pasada administración, pero algunos se niegan.

El alcalde de Benito Juárez, cuya cabecera es Cancún, denunció presiones de los regidores entrantes para contar con un amplio cuerpo de asesores y cantidades de dinero importantes para diversos gastos. Espero convencerlos de que tienen que ser congruentes con la realidad que viven el gobierno y el pueblo, indicó.

Quieren una serie de emolumentos que tendremos que discutir, pero a favor del pueblo, agregó. Por ejemplo, los regidores quieren al menos dos asesores cada uno y vales de gasolina mensuales por 10 mil pesos.

Según el alcalde, en la pasada administración, donde algunos regidores habían secuestrado el cabildo, algunos con sueldos de 90 mil a 130 mil pesos. Al parecer Víctor Viveros ganaba más de 250 mil pesos mensuales.