Siguió la música este domingo en el tercer día del festival Vive Latino. Bandas consagradas, así como emergentes, regalaron felicidad a los asistentes al Foro Sol, donde aún permeaban las partículas de la nostálgica noche del sábado, en la reconciliación de Caifanes.

El Vive cerró esta edición con unas 170 mil personas, contando las del domingo. En esta fiesta roquera se puso el acento en la proclama por la paz y el alto a la violencia provocada por la lucha contra el narcotráfico. Otro aspecto fueron los homenajes a Eugenio Toussaint, a Rita Guerrero y otros ausentes.

Para el grupo Chikita Violenta, que hizo su segunda presentación en el encuentro y presentó el disco Tres, el valor del Vive Latino es subsistir. Tocó en el escenario Indio justo después de Jessy Bulbo y antes de Rey Pila; estos últimos regalaron algunos temas de su material más reciente.

El grupo Los Daniels manifestó su felicidad por ser parte del encuentro, el cual, dijo, es un clásico que permite mostrar su trabajo a todo el país. En el escenario Indio ofrecieron algunos temas de su más reciente producción discográfica, A casa.

Un solista que llamó la atención fue Antonio Zúñiga, el presunto culpable, el del polémico documental, quien ahora presentó su disco de hip hop, muy chilango. En entrevista con La Jornada anterior a su concierto, dijo: Quiero rehacer mi vida con mi música; quiero llevar una vida de tranquilidad con mi esposa y con mi hija.

Agregó que sólo quiere hablar de música y nada de política ni de cosas judiciales, “sólo de Iztaparap. La película ahora la he vivido como un espectador más. Hay más cosas que hacer y no pienso voltear atrás. Me han invitado a hacer presentaciones, pero me preocupa el tema de mi seguridad. Muchos chavos hiphoperos me invitan a tocar y eso lo hago con todo gusto”.

–Entre defender los derechos humanos o defender el derecho a la información, ¿qué elige?

–Hay gente que se especializa y que ha estudiado. Lo que digan tiene más valor que lo que yo pueda decir.

–¿Y la óptica de su acusador?

–Pregunte sobre mi música.

Y la música siguió...

A las 2 de la tarde comenzaron las actividades, en medio de una radiación solar terrible, lo cual no espantó a los jóvenes que, igual que en los dos días anteriores, se tiraban en la larga alfombra o se refugiaban en la sombra, mientras se refrescaban con su típica cerveza.

Jessy Bulbo abrió la jornada musical con muchas ganas, lo que sorprendió a varios porque la tarima del escenario estaba muy caliente. Se quejó de que a las roqueras las programaran en horarios muy tempranos. Eso no es justo. Éste es un festival en el que predominan los hombres y destacan hasta en los horarios. De todos modos, me gusta el Vive Latino.

Para Los Elásticos, que llegaron con máscaras azules y promovieron su disco Cuatro versus cuatro, el mejor sencillo es El infierno. Añadieron que el surf ha avanzado en México y que sólo faltaron la arena y el mar, porque Sol había de sobra. Dijeron que la piel se les pone chinita de recordar la respuesta del público, que los hizo sentir como si estuvieran en El Alicia, al que consideran su antro-casa.

Retaling tocó cóvers de Led Zeppelin

Llegaron unos muchachitos de 14 años que se hacen llamar Retaling, que tocaron cóvers tipo Led Zeppelin. Quién sabe por qué, pero llegaron al Foro Sol. Lo que aseguraron es que alguien los descubrió y los invitó. No faltó un mala leche que comentara: Deben ser hijos de papi.

En otro escenario estuvo Candy, que lo más que tocó fue una rola que se llama Despertar. Agradaron y en esto tiene mucho mucho que ver que son apoyados por Joselo, de Café Tacvba. Cantan en varios idiomas y Joselo dijo que son una mezcla de talento y algo raro que no sabe describir. El tacubo afirmó que las bandas de hoy se quejan de las disqueras y apoyan a los piratas, pero debería ser al revés.

De Venezuela llegaron Famas Lout, que afirmaron que tocan algo muy raro para ser pop, y viceversa. La neta es que no tan fusión, pero ya fueron postulados al Grammy.

Dijeron que la ley 50-50, establecida en su país por el presidente Hugo Chávez, tiene su mérito al apoyar a la música local, pero se corre el riesgo de que a la larga sólo se programen músicos que respaldan al Estado.

Este último día del Vive se sintió más que caliente. Total, ya habrá tiempo para estar a la sombra y no quemarse. En el horizonte ya muchos esperan a Babasónicos y a Chemical Brothers.