Real y Reinoso se enfrentarán ahora como estrategas
Domingo 10 de abril de 2011, p. a17
Chivas y América disputarán esta tarde la edición 156 del duelo más importante del futbol mexicano, en un clásico vital para las aspiraciones de ambos equipos de clasificar a la liguilla.
Uno de esos partidos que sacan lo mejor o lo peor de un jugador; una prueba de fidelidad a sus colores, de orgullo tribal. Ganar o perder un clásico se queda grabado en la memoria. Lo dijo el azulcrema Daniel Montenegro: “En esos partidos no se vale irte a tu casa y decir ‘pude haber hecho algo más”’.
Por primera vez el estadio Omnilife será el escenario del clásico mexicano, razón por la cual, desde su inauguración el 30 de julio de 2010, sus más de 49 mil localidades estarán llenas.
América, dirigido por el chileno Carlos Reinoso, marcha en el sexto lugar de la tabla general, con 19 puntos, uno arriba del Guadalajara, comandado por José Luis Real.
Parece que este duelo llega en mejor momento para los tapatíos, ya que sin ser espectaculares acumulan dos victorias al hilo y cuatro partidos sin perder, con un funcionamiento que parece empezar a consolidarse.
Pero luego de un bache donde sumó tres derrotas consecutivas –ante Cruz Azul, Monterrey y Fluminense–, el América llega con la decisión de recobrar el buen paso y con el optimismo que les inspira haber vencido a Argentinos Juniors, en la Copa Libertadores, y de superar 5-4 a Puebla en el Azteca.
Esos resultados lo convierten en la mejor ofensiva, con 25 goles, casi el doble de Chivas, que lleva 15; pero aún ronda en su última línea el fantasma de los errores puntuales
, como llaman los propios jugadores americanistas a las fallas que comenten los defensas y que les ha costado comerse 23 tantos. Por el contrario, los rojiblancos exhiben una de las mejores zagas del torneo, con sólo nueve anotaciones.
Un aspecto que le da otro matiz a esta edición es que enfrentará a dos técnicos que disputaron en los años 70 varios clásicos como jugadores, de los cuales casi todos se los llevó Carlos Reinoso. Esta será la primera vez que se enfrentan como técnicos.
Para el chileno será especial, porque hace casi 27 años, ya como entrenador, gritó por última vez un gol que significó el título a costillas del rival, en la temporada 1983-84.
Previo al clásico –que será a las 18 horas–, Pumas, líder del certamen con 25 puntos, recibirá a Tigres, sublíder con 23, en el estadio Olímpico Universitario al mediodía: ambos son candidatos a ganar el título.
Al mismo tiempo, el Toluca, noveno con 16 unidades, está obligado a ganar de visitante al Puebla (13 puntos) si quiere meterse entre los ocho primeros lugares cuando faltan cuatro jornadas por disputarse.