Viernes 8 de abril de 2011, p. 35
Lisboa. Portugal se convirtió en el tercer país de la eurozona en pedir un rescate financiero, después de Grecia e Irlanda, la cual muestra que la crisis de la región dista de estar resuelta, mientras España descartó cualquier riesgo de ser el próximo en la lista. La nación más pobre de Europa occidental, con 10.5 millones de habitantes, tuvo que buscar un rescate, luego de meses de defenderse de la presión del mercado para requerir asistencia, mientras los costos del endeudamiento subieron en medio de una profundización de la inestabilidad política. El primer ministro saliente de Portugal, José Sócrates, anunció que había decidido enviar un pedido de asistencia financiera a la Comisión Europea (CE)
, ante la dramática
situación de las finanzas de su país. Sócrates afirmó que el rechazo parlamentario a medidas de austeridad adicionales el mes pasado agravó la situación financiera.