Villahermosa, Tab., 31 de marzo. Unas 200 mujeres del Movimiento México Despierta se apostaron hoy en el Congreso del estado para denunciar que en al menos 15 comunidades del municipio de Mascupana siete empresas graveras y la fábrica de cemento Apasco contaminan el entorno y provocan daños a caminos y viviendas.

A gritos, exigieron la intervención de los diputados locales. Julio Álvarez de los Santos, quien dirigía la protesta de las inconformes, acusó que los lugareños están en peligro permanente por “el manejo de desechos tóxicos.

Los caminos de la región están intransitables y las explosiones con dinamita siguen cuarteando casas en comunidades cercanas al cerro, acusó.

Una comisión de las manifestantes intentó entrevistarse con el diputado priísta José Carlos Ocaña Becerra, presidente de la junta de coordinación política, pero los vigilantes se lo impidieron.

Las mujeres advirtieron que continuarán con sus protestas hasta que los diputados “atiendan nuestro llamado y se conviertan en verdaderos representantes populares.

Ahí está a la vista la contaminación. Cansados de tanta impunidad de estas empresas, que no cuentan ni con permisos para explotar el cerro, venimos a solicitar la intervención de los legisladores, concluyó Álvarez.