Sin sentirse desconcertado por la decisión del equipo Sauber de no apelar de la descalificación en la carrera en Australia, el mexicano Sergio Pérez afirmó que se queda con lo positivo de haber logrado un debut exitoso en la Fórmula Uno y mantiene la convicción de que llegará a ser el mejor piloto del mundo.

Somnoliento luego de forzar su despertar en Singapur, adonde se trasladó entre las carreras de Australia y Malasia, el piloto jalisciense, en una teleconferencia enlazada por la Escudería Telmex, tenía claro lo que había pasado después del séptimo puesto que alcanzó el pasado domingo en la fecha de apertura: un sitio histórico para un novato mexicano en la carrera que ganó el campeón defensor, el alemán Sebastian Vettel al volante de un RBR-Renault.

Fue un fin de semana soñado, a pesar de todo. Si me hubieran dicho que iba a terminar séptimo en mi debut y que iba a pasar lo que pasó, lo hubiera firmado, porque aprendí muchísimo. Estoy contento, fue una experiencia inolvidable en mi primera carrera en la F-1, señaló.

Checo tenía claro que Sauber no apelaría de la descalificación ante la Federación Internacional de Automovilismo, luego de que el bólido no libró la inspección posterior debido a 10 milímetros de más en el alerón trasero.

“Me duele lo que pasó por el equipo, porque lo del alerón no nos beneficiaba, y ya checándolo, hasta cierto punto perjudicaba el desempeño del auto.

Es una lástima lo que pasó, pero las reglas son así; hay que ser positivos y darlo todo otra vez en Malasia, señaló en relación con la siguiente fecha (segunda), a disputarse del 8 al 10 de abril.

El equipo tomó la decisión correcta. A final de cuentas ya se veía perdido y no tenía caso apelar. Se checó en la fábrica y es un error. Creo que hay que dar vuelta a la página. El equipo está concentrado en lo que viene. Tenemos un coche que está en los puntos, eso es lo importante, y debemos ser positivos para recuperar el puntaje perdido, explicó.

Para él todavía no es posible hablar de porcentajes de asimilación al mando del Sauber C30 de Ferrari: Apenas es la primera carrera. Nos falta más, adaptación en muchas otras cosas, en entender un poco más los neumáticos y el coche en una vuelta, en referencia a cómo debe proceder específicamente en la calificación.

Para ser mi primer Gran Premio estoy satisfecho y motivado para el futuro, que pinta bien. Vienen momentos difíciles y una curva de aprendizaje grande, pero estoy seguro de que saldré adelante.

Rechazó haber experimentado algún tipo de nerviosismo, lo cual, incluso a él, le sorprendió: Estoy muy tranquilo. Es algo que siempre he soñado y tengo mucha confianza en mí.