A diferencia de las crisis económica anteriores, en la más reciente, en 2008, la banca mexicana no fue factor del problema económico; ahora es parte fundamental de la solución, sostuvo el presidente Felipe Calderón en reunión con los consejeros de Banamex.

En el encuentro, el mandatario se mostró elogioso del papel del sector financiero en la recuperación económica; es importante, dijo, pues hay una economía fuerte y una banca sólida.

Durante la reunión, efectuada en un hotel de Polanco, Calderón Hinojosa aseguró que México tiene un sistema financiero robusto que se nota en el hecho de que el grado de morosidad de pagos, de cartera vencida, se ha reducido significativamente y se han retomado, por fortuna, los niveles previos a la recesión internacional.

El presidente habló sobre otro tema de interés para los empresarios, la inseguridad. Defendió su lucha contra el crimen organizado, pero admitió problemas para superar los actuales niveles de inseguridad: mientras sepamos todos lo que la gente sabe, que de los primeros que hay que desconfiar son los policías, que son los primeros que dicen, son los cómplices de los criminales, los que utilizan la información pública para atacar a la gente.

En este sentido, una vez más habló del fortalecimiento de una nueva policía federal, por lo que ahora, dijo, la clave es avanzar en el mejoramiento de los cuerpos estatales, que, cuando logren consolidarse va a ser el día de la victoria en este tema de la inseguridad.

Por ahora, afirmó, sólo cuatro entidades tienen centros de control de confianza acreditados, donde se pasa báscula, literalmente, desde los secretarios de Seguridad Pública hasta el último policía, pasando por todos los comandantes.

A la reunión acudieron los ex presidentes de Brasil, Fernando Henrique Cardoso –al que definió como el gran transformador de la economía de ese país y de Petrobras– y de Colombia, Álvaro Uribe. De este último, exaltó su desempeño para enfrentar la inseguridad en su país y lo calificó de mandatario con valentía y arrojo.

Calderón destinó más atención al rumbo de la economía y al papel de la banca en México. Afirmó que en enero el índice de capitalización del sistema financiero mexicano fue de 17 por ciento, el doble del estándar sugerido a escala internacional, de ocho por ciento. Insistió en que a pesar del difícil entorno económico de la crisis financiera global, la banca en México se ha mantenido sólida y solvente.

En torno de la recuperación económica, el jefe del Ejecutivo destacó que fundamentalmente ésta se ha producido por el sector exportador y en los meses recientes por el mercado interno. Para que nuestra economía crezca aún más, es importante equilibrar entre el sector externo y el interno, porque, la verdad, son las exportaciones las que han crecido sustancialmente.

Subrayó que la desconfianza del consumidor –motivada por la percepción que tiene de las malas noticias sobre el rumbo del país– incide en que no haya un repunte más acelerado del consumo interno. Y no es para menos; no digo que se ignoren las noticias, pero simplemente que ha habido tal cúmulo de noticias adversas, negativas, tan frecuentes, que parece que hay un constante bombardeo, un esfuerzo de demolición del ánimo nacional, sostuvo.