Monterrey, NL, 11 de marzo. El movimiento Universitarios Unidos por la Paz 11:11 realizó hoy cuatro actos simultáneos en igual número de universidades locales para repudiar la violencia y comprometerse a trabajar en favor del desarrollo comunitario y combatir la criminalidad.

Uno de los actos se realizó en la explanada de la rectoría de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), que congregó a unas 3 mil personas, donde hubo un minuto de aplausos en memoria de Raúl Javier Villarreal Martínez, estudiante del primer semestre de arquitectura, de 17 años, que murió la noche del jueves, al recibir un balazo en la cabeza debido al fuego cruzado entre militares y sicarios que se enfrentaron en el centro de Monterrey.

La manifestación fue en el mismo sitio donde hace cinco meses se se congregó una multitud de universitarios por la muerte de la estudiante de artes visuales Lucila Quintanilla Ocañas, víctima de una bala perdida, el 7 de octubre de 2010, cuando un sicario presuntamente atentó contra un celador del penal de Topo Chico en el centro de la ciudad.

Alberto Mora, estudiante de ciencias políticas de la UANL, en nombre de la comunidad estudiantil pidió sumar esfuerzos para crear el México que todos queremos ver, con mejores oportunidades para todos.

Filiberto de la Garza Ortiz, secretario de Asuntos Universitarios, refirió: Nuestras únicas armas son las letras, los universitarios vamos a enfrentar la violencia con acción social, con atención a la gente necesitada, para dar un giro a lo que está pasando.

El secretario general de la UANL, Rogelio Garza Rivera, señaló que a partir de esta fecha y hasta el 11 de noviembre, el movimiento realizará actividades para fomentar honestidad, trabajo, estudio y solidaridad, para rescatar al país, al estado y a nuestra universidad.

Otra concentración se realizó frente a la rectoría del Tecnológico de Monterrey, también convocada por la Unión Universitaria 11:11, donde el dirigente estudiantil, Adrián Martínez, explicó que este movimiento busca activar a los ciudadanos para ser agentes de cambio, empoderar a la sociedad para generar el cambio y a través de los jóvenes crear conciencia de que el cambio se puede generar.

En los cuatro actos se repartieron pulseras que simbolizan el compromiso de buscar la paz, impulsando un mejor ambiente social con actos de solidaridad, compromiso y participación ciudadana.

En la Universidad de Monterrey, Jéssica Terrazas Almaguer, presidenta de la Federación Estudiantil de la institución, pidió comprometerse a que haya justicia basada en la verdad; que los conflictos se resuelvan con diálogo. Un acto similar se realizó en la Universidad Regiomontana.